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Hace falta más generosidad. Melilla necesita menos planes y más acción.

MELILLA HOY 30 10 2023

La Semana. MH, 30/10/2023

Por: J.B.

El ejemplo de Novak Djokovic. Hay que tirar el muro

El medio The Tennis Letter ha desvelado algo que muy poca gente conocía: Novak Djokovic paga todos los gastos de tenis, viajes, entrenamiento, etc. de un compatriota suyo, Hamad Medjedovic, que también integra el circuito profesional.

Hamad Medjedovic (20 años, N°107) ha sido, esta temporada, campeón de tres torneos Challenger y sorprendente semifinalista en el ATP 250 de Gstaad.

«Novak Djokovic me ha estado ayudando económicamente. Dándome todo lo que necesito para mi carrera. Lo cubrió todo. Simplemente me ayudó cuando lo necesité y todavía me está ayudando de muchas maneras. Me alegro de que esté ahí para mí» ha revelado Medjedovic.

Djokovic, cuando el padre de Hamad le decía que se estaba (y está) gastando mucho dinero en su hijo, le contestó lo siguiente: «‘¡Edo, no hago esto por dinero! Tengo un lugar donde gano dinero. Simplemente, mi papel y mi tarea es ayudar. ¿Qué clase de persona sería si no ayudara a los niños que lo merecen, que aman el tenis?»

El ejemplo de Novak Djokovic, número uno del tenis mundial (seguido muy de cerca por Carlitos Alcaraz) debería cundir. Su generosidad sin esperar nada a cambio y su ayuda no aireada (todo ha salido a la luz pese a que él nunca ha contado nada) contrastan con lo que está pasando, desde hace ya varios años, en la política española.

Nuestros políticos actuales carecen de generosidad y de altura de miras

Nuestros políticos actuales carecen de generosidad y de altura de miras. Solo son generosos para conseguir algún fin que, en la mayoría de las ocasiones, no coincide con ser lo mejor para la mayoría de los españoles.

¿Se le puede pedir generosidad a alguien que sólo piensa en si mismo y en sus fines y que utiliza nuestro dinero para conseguir apoyos que le permitan mantenerse en el sillón? La respuesta, dada la catadura de Pinocho y la “risitas/aplausos”, es que no.

“Der Fall der Berliner Mauer” (alemán) o “The fall of the Berlin wall” (inglés) son la traducción de “La caída del muro de Berlín”. La caída del muro hizo que los berlineses de la parte oriental se liberaran de la mordaza del “todo público” que dominaba la parte comunista de Berlín (ciudad en la que estuve meses después de la caída del muro) y se integrasen en una democracia en la que se primaba lo privado, la libertad y el mercado. Berlín oriental era un erial en el que no había tiendas, no había casi luces, no había negocios y, qué casualidad, un lugar del que la gran mayoría quería huir (si no lo hacían en masa era porque los mataban si intentaban huir a la parte oriental).

En España y en Melilla (aquí especialmente) debemos romper el muro del “todo público” que no nos hará progresar (demostrado por la historia)

No queremos, no hacen falta, planes de desarrollo que vayan a ser desarrollados por funcionarios o políticos. Hay que pasar a la acción y nuestros actuales políticos locales (pese a sus buenas intenciones) no son capaces de hacerlo porque están lastrados por la burocracia, los enchufados, los que están de baja, etc.

Se debe confiar en las empresas privadas, locales o de afuera, para que se hagan proyectos que mantengan o generen empleo y también para que mejoren la vida y el ocio de los melillenses. Engordar el sector público (improductivo por naturaleza) con más funcionarios, directores generales de nada, cargos a dedo, etc., no es la solución y tampoco lo es que la Ciudad Autónoma o sus empresas públicas hagan las cosas directamente. Se ha demostrado (la situación del campo de Golf es un claro ejemplo) que lo que sea gestionado de manera directa por el sector público no funcionará y nos costará mucho más dinero a todos los melillenses. No debemos olvidar que los políticos trabajan (o deberían) para nosotros, que somos los que les pagamos.

Aumenta el número de mujeres solteras en Marruecos

El gobierno marroquí está preocupado por el descenso de la natalidad. Más del 60% de las mujeres marroquíes de entre 20 y 24 años son solteras, y también lo son más del 28% de las mujeres marroquíes de entre 30 y 34 años. El número de mujeres solteras en Marruecos supera los 8 millones, lo que equivale al 60% de las mujeres con la edad mínima para contraer matrimonio, fijada en 18 años. Las mujeres solteras en Marruecos han aumentado alrededor de un 4,6%, mientras que la proporción de hombres solteros aumentó un 2,6%.

Los hombres y las mujeres sólo somos diferentes en lo físico; en todo lo demás (derechos, deberes, inteligencia, capacidad, etc.) somo iguales

En las últimas décadas, importantes cambios en la sociedad marroquí han liberado a las mujeres, al menos en parte, de la tutela del hombre. Aunque el gobierno marroquí asocia, erróneamente, este boom de la soltería en las mujeres con la pobreza y la vulnerabilidad, las razones son otras. Es, en mi opinión, la consecuencia de un acceso mayor a la educación por parte de las mujeres (algo que antes tenían vetado) y de la influencia de todo lo exterior (redes sociales, internet, prensa, etc.). Las mujeres marroquíes van perdiendo el miedo a decir “no” a bodas pactadas sin su consentimiento y empiezan a darse cuenta que tienen valor sin la tutela de los hombres. Esperemos que sigan avanzando en algo que debería ser evidente para todos: los hombres y las mujeres sólo somos diferentes en lo físico; en todo lo demás (derechos, deberes, inteligencia, capacidad, etc.) somo iguales.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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