La naviera Yasmine Line estudiaba suspender la línea marítima entre Benalmádena y Melilla por el escaso número de viajeros. A esto se sumó el que no recibieran subvención estatal para hacer frente a los costes del establecimiento de la línea.
Un falso incendio en el Gurugú alarmó a la población melillense, que temía por la seguridad de un grupo de alumnos del Anselmo Pardo de excursión en la zona. Dicha falsa alarma movilizó a los Bomberos y a la Policía Local.
El diario incluía un amplio reportaje sobre el lamentable estado de conservación de la Casa de la Juventud. La concejala de Juventud, Mª Antonia Garbín, proponía un importante proyecto de actuación.