Con el tema de hoy la Columna Sanitaria quiere agradecer a todos los Bomberos, y en especial a los de Melilla, su eficaz y abnegada labor en multitud de situaciones, además de los casos de incendio, poniendo su vida en riesgo en algunas ocasiones. Vayan desde estas líneas mi reconocimiento y felicitación al CUERPO DE BOMBEROS de MELILLA.
El tema que nos ocupa hoy es la PIROSIS que es un Síntoma, que aparece en múltiples enfermedades y situaciones y que se DEFINE como una sensación de ardor, quemazón o DE “FUEGO”, que surge en el estómago y puede ascender hasta la garganta. Puede aparecer a cualquier hora, aunque suele producirse unos 30-60 minutos después de comidas copiosas y ricas en grasas. No hay diferencias de sexo para padecerlo y en las embarazadas pueden sufrirlo un 25-70% de ellas y era frecuente oír decir a nuestras abuelas, en aquellos años del pasado siglo, que el futuro bebé nacería “con mucho pelo”.
Las CAUSAS son múltiples y la mayoría de ellas relajantes del Esfínter Esofágico inferior (EEI). Así tenemos:
1-Alteraciones anatómicas como la Hernia de Hiato Esofágico
2-Embarazo
3-Comidas copiosas
4-Alimentos (ricos en grasas, fritos, chocolate, café y té, alcohol, bebidas gaseosas)
5-Tabaco
6-Obesidad
7- Estrés
8-Fármacos (Sales de hierro, Antiinflamatorios, Corticoides, Teofilina, Progesterona, Benzodiacepinas y antagonistas del Calcio)
El TRATAMIENTO tiene dos vertientes que confluyen en la curación o mejoría de los pacientes. Esas vertientes son:
a) Tratamiento NO FARMACOLÓGICO ( Medidas higiénicos-dietéticas) como evitar las comidas copiosas ricas en grasas, chocolate, té y café, menta, bebidas gaseosas, alcohol y el tabaco, cebolla cruda, tomates, cítricos, y los fármacos del grupo 8 de las causas. Evitar acostarse recién comido. Dormir con la cabecera elevada (2 almohadas). Evitar agacharse o hacer ejercicio inmediatamente después de comer. Comer entre 5-6 comidas pequeñas al día y hacerlo despacio y masticando bien. Acostarse 2 horas o más después de la cena y sobre todo evitar, en lo posible, la causa responsable.
b) Tratamiento FARMACOLÓGICO: Para el alivio de la Pirosis ocasional está indicada la utilización de algunos Antiácidos (algunos de ellos en comprimidos para chupar). Cuando la Pirosis se presenta con mayor frecuencia y es consecuencia de causas más severas, están indicados los Antihistamínicos H2 o los Inhibidores de la bomba de protones. En todo caso será el Médico de Atención Primaria o el Especialista los que instaurarán el tratamiento ideal para cada caso.