Los artistas melillenses se volcaron ayer con la segunda Gala de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). Danza y flamenco se dieron la mano para ofrecer al público asistente un espectáculo de altura, de gran calidad que se hizo corto a pesar de sus dos horas de duración. La velada se dividió en dos partes. La primera protagonizada por el alumnado de la Escuela de Danza con unas preciosas coreografías, para enlazar en la segunda con una velada típica de los Cafés Cantantes donde el flamenco se convirtió en hilo conductor. La AECC destinará la recaudación a proyectos de investigación de la enfermedad.