En los últimos años FETE-UGT ha venido reclamando una adecuada planificación en la construcción de los centros educativos adaptada a las necesidades reales de plazas escolares a corto, medio y largo plazo, y teniendo en cuenta el aumento de la población de Melilla, que diametralmente opuesto al de otros zonas de España. “Mientras no consigamos, dice el sindicato-, la mencionada infraestructura difícilmente conseguiremos los mejorar los resultados del Informe PISA que sitúan a Melilla en los puestos más desfavorables”.
La construcción de nuevos centros docentes conlleva un aumento en el cupo de profesorado, disminución de la ratio, lo que implica mejorar los resultados, la calidad educativa y el futuro de los alumnos, así como una mejora en la dignidad del trabajo docente.
Para FETE -UGT, la educación debe ser una inversión y no un gasto, porque es uno de los pilares básicos para alcanzar el estado del bienestar en nuestra sociedad. “En este sentido o mejoramos la inversión en educación o condenamos a los melillenses a ser ciudadanos marginados por tener los mayores índices de paro y un futuro profesional tan incierto como precario”.
