“La labor más desagradable es proteger la frontera”, pero España “no va a abdicar”. Así lo dijo ayer el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en declaraciones a Onda Cero, donde abordó la última entrada de inmigrantes subsaharianos a la ciudad. El ministro apuntó que las "fronteras abiertas significarían la desaparición de los estados", y dejó claro que, aunque España "tiene la capacidad de acogida que tiene, Europa tampoco lo consentiría". En este sentido, Fernández Díaz subrayó la necesidad de “ayudar a los países de origen y tránsito” de la inmigración ilegal. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, habló ayer del último intento de salto a la valla de Melilla por parte de unos 150 inmigrantes subsaharianos, de los cuales 20 consiguieron cruzar el perímetro fronterizo. En este sentido, el ministro insistió en el "deber" de España de proteger la frontera que es "la labor más desagradable" de la que España "no va a abdicar".
Fernández Díaz, en declaraciones a Onda Cero, señaló que las "fronteras abiertas significarían la desaparición de los estados", y apuntó que, aunque España "tiene la capacidad de acogida que tiene, Europa tampoco lo consentiría". Así, apostó por "ayudar a los países de origen y tránsito" para que esas personas "no se vean desesperadas para realizar estos intentos de inmigración ilegal".
De igual modo, el ministro reconoció que, "una vez comprobado lo sucedido en Ceuta", donde perdieron la vida 15 inmigrantes, habría sido mejor "no lanzar pelotas de goma, sobre todo porque no sirvieron para disuadir la entrada masiva en territorio español".
De hecho, señaló Fernández Díaz que, "una vez aprendido de la experiencia", el Ministerio "ha dado la orden de que nunca se volvieran a utilizar ante un intento de entrada ilegal". En cualquier caso, el ministro dejó claro el "carácter disuasorio" con el que se utilizaron las pelotas de goma y puso como ejemplo el hecho de que 23 de los inmigrantes "llegasen sanos y salvo a la playa". Para Fernández Díaz, "si la intención hubiese sido que no llegasen (a la playa) no habrían llegado".
Así las cosas, el ministro manifestó que el uso de material antidisturbios está recogido en los protocolos de actuación anteriores al año 2005 y ha precisado que será "la autoridad judicial" a la que se le ha remitido las grabaciones que acreditan las conversaciones de la cadena de mando registradas aquella noche "quien dictamine sobre ello".