La Peña Nacho Aznar se desplazó, el pasado fin de semana, por segunda vez en la presente temporada para acompañar a la U.D. Melilla y animarla a conseguir una victoria ante el Real Jaén por alcanzar los puestos de Play-Offs. Si el anterior viaje tenía como destino Granada, en esta ocasión casi setenta aficionados azulinos se desplazaron con el equipo a tierras jiennenses, donde finalmente el equipo empató ante un correoso rival. El ambiente festivo acompañó en todo momento a los expedicionarios melillenses, que comenzaron su periplo el sábado de medianoche, tomando el barco con destino a Málaga, entonando ya los primeros cánticos. De la capital costasoleña a la del olivo fueron en un autobús. En él todos pudieron cantar, reir y soñar… con la victoria de su equipo.
En este mismo trayecto se sortearon una serie de regalos: un balón firmado por los jugadores del club, un chándal Macron oficial, una camiseta firmada por los azulinos y cedida por Nacho Aznar y una serie de galletas hechas para la ocasión, unas con el emblema «Viaje a Jaén» y otras con el nombre de la entidad. Los artífices fueron José Luis y Marian, la pareja de aficionados unionistas que ganó el sorteo llevado a cabo en las redes sociales de la entidad. Ellos, que ya fueron con la peña a Granada, fueron premiados con la posibilidad de repetir la experiencia. Una vez más estuvieron acompañados por sus hijos en la expedición a tierras aceituneras.
Una vez en el Estadio La Nueva Victoria, los aficionados melillenses tuvieron que soportar estoicamente un sol de justicia, pero ni el calor ni las oportunidades falladas por los unionistas impidieron que los implicados estuvieran animando con sus gritos hasta el minuto noventa.
De nuevo, la Peña Nacho Aznar fue todo un ejemplo de organización, civismo, saber estar y pasión por sus colores, y esto es en gran parte gracias a su presidente Manolo Aznar, que se desvive en cada viaje por intentar hacer lo más amena posible la experiencia. Visto el grado de satisfacción de los hinchas y su deseo de organizar nuevos viajes, lo consigue.
Con la pena de no haber podido amarrar los tres puntos en Jaén, los melillenses regresaron en el Balearia Express de las 19’300 horas, llegando a Melilla a las 00’30 horas. Después de tan grata experiencia tan sólo cabe empezar a pensar en el próximo destino.
