"El Gobierno ha pedido un pacto de inmigración cuando se ha visto acorralado tras dos años de desidia y no haber hecho nada". Así al menos lo consideró ayer el secretario general del Partido Socialista de Melilla (PSME-PSOE), Gregorio Escobar, que criticó que, hasta hace unos días, nadie del Gobierno de España había pedido a la Unión Europea (UE) su implicación en materia de inmigración. El secretario general del Partido Socialista de Melilla (PSME-PSOE), Gregorio Escobar, aseguró ayer que el Gobierno ha pedido un pacto de inmigración cuando se ha visto "acorralado tras dos años de desidia y no haber hecho nada".
El líder socialista, en declaraciones a Televisión Española (TVE), recordó que su formación siempre ha estado a favor de negociar, dialogar y llegar a acuerdos en estos temas, pero, sin embargo, cuando el ministro del Interior, Jorge Fernández, visitó Melilla hace dos años, "dijo que nos olvidásemos del problema de la inmigración porque en unos meses iba a estar absolutamente solucionado con la Reunión de Alto Nivel (RAN) entre España y Marruecos y que nos olvidásemos de los problemas de la frontera".
Además, recordó que Fernández Díaz, junto con el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, y dirigentes del Partido Popular (PP), entre ellos Juan José Imbroda, han estado dos años hablando sobre la necesidad de implicar a la Unión Europea (UE) en esta cuestión y, sin embargo, hasta hace unos días nadie del Gobierno de España le había pedido nada a la UE.
Ahora, "el mismo que nos dijo que todo lo iba a solucionar el PP, dice que necesita un pacto", señaló Escobar, que dio la "bienvenido a la política de consenso y diálogo, pero llega dos años tarde".
Eso sí, el líder del PSOE local dejó claro que este acuerdo no puede basarse sólo en palabras, sino que debe hacerlo en hechos. Así, se refirió a la propuesta que el PSOE planteó en octubre en el Congreso sobre esta cuestión y que contó con los votos a favor de todos los partidos con representación en la Cámara Baja excepto los del PP.
En aquella propuesta, el PSOE planteaba una batería de medidas, tales como el incremento de efectivos de los profesionales de la Guardia Civil y la Policía Nacional, mejores medios técnicos, una profundización en la coordinación con Marruecos en el control de flujos migratorios y la recuperación de la política de cooperación al desarrollo de los países de origen de los que provienen los inmigrantes.