La segunda fase de las oposiciones a la Policía Local, dedicada al examen de conocimientos y de ortografía, ha provocado una auténtica escabechina sangría entre los aspirantes. Más de la mitad han sido eliminados en la primera prueba de esta fase, donde tenían que contestar un total de 100 preguntas.
De los 76 aspirantes que lograron superar las pruebas físicas, sólo 30 siguen adelante en las oposiciones para hacerse con una de las 8 plazas convocadas. Cuarenta y cinco de los opositores se han quedado en el camino, mientras uno no se presentó.
En la lista de calificaciones publicada por el tribunal de las oposiciones esta semana, abundan dos palabras: «No apto». De hecho, es lo que más llama la atención en un rápido vistazo a los cuatro folios que ocupan los 76 aspirantes que habían superado las pruebas físicas y estaban convocados al examen escrito el 25 de mayo en la UNED.
Un análisis más detallado revela que de los 76 aspirantes, sólo 30 lograron los 25 puntos mínimos que se exigían para aprobar el examen. Para ello, debían contestar correctamente al menos 50 preguntas de las 100 que tenía el test y no equivocarse en ninguna, ya que por cada tres fallos, perdían un acierto. Así lo establecen las bases, que dan 0,5 puntos a cada pregunta correcta.
Suspenden el 60%
Este examen tipo test, con un enunciado y cuatro alternativas de respuestas de las que sólo una era verdadera, ha provocado 45 suspensos, el 60% del total de los opositores. Ninguno de ellos, al igual que un aspirante que no se presentó al examen, podrá hacer la segunda de las pruebas contempladas en la fase de conocimientos: el examen de ortografía.
Según las bases, esta prueba consistirá en la contestación por escrito a un cuestionario para evaluar la capacidad ortográfica del opositor. Para su calificación se utilizará la fórmula de corrección aplicada a la prueba de conocimientos. La calificación será de «apto» o «no apto».
Se multiplican las opciones de lograr una plaza para los ‘supervivientes’
Con tantos suspensos en el examen de conocimientos, las opciones de obtener una de las ocho plazas ofertadas se multiplican para los ‘supervivientes’. De este modo, cada una de las plazas será disputada entre 3,75 opositores, en lugar de entre 9,5 como estaba marcado antes de hacer el test. Al inicio de las oposiciones, cada plaza debía ser disputada entre 12,125, por lo que el camino se ha despejado sobremanera para los que se han presentado a las oposiciones con una mejor preparación.
