Una moto con cuatro personas a bordo -el piloto, dos mujeres y un bebé-, todos ellos de origen magrebí, entraron ayer a primera hora de la tarde a Melilla por Horcas Coloradas. La embarcación de la Guardia Civil que les perseguía, y posteriormente un coche de la Policía, lograron interceptarlos. Todo ocurrió minutos antes de la cinco de la tarde, sorprendiendo a los bañistas.