El doctor melillense, especialista en Radiología de Imagen Diagnostica y del Hospital Comarcal agradece a la Ciudad Autónoma que le haya concedido esta “enorme distinción” : “La recibo con mucho orgullo”
Con mucho agrado y mucho orgullo.
De esta forma reacciona el doctor melillense especialista en Radiología de Imagen Diagnóstica y del Hospital Comarcal, Enrique Remartínez Escobar ante la noticia de que la Ciudad Autónoma de Melilla le concederá el próximo 16 de septiembre la Medalla de Oro de Melilla, la máxima distinción que otorga el Gobierno melillense, por su trayectoria y méritos profesionales, así como por “el cariño” que le otorga la ciudadanía melillense.
“Es un orgullo que piensen en ti para darte una medalla del tipo que sea”, afirma en declaraciones al MELILLA HOY, reconociendo que le sorprendió un poco que le concedan tal distinción. “Pero muy buen bienvenida es”, apostilla.
Este galardón llega siete meses después de que en febrero de este año fuera galardonado por segunda vez con el premio Doctoralia Awards, un galardón que reconoce a los especialistas en salud mejor valorados del país tanto por sus compañeros de profesión como por sus propios pacientes.
“Cuando uno ya es un poco mayor los premios te hacen ilusión, pero no es lo mismo que (cuando eres más joven). Son buenos desde el punto de vista de galardones, pero no es lo más importante”, reflexiona.
“Siempre te gusta (recibirlos)”, apunta, señalando que los premios ‘Doctoralia Awards’ “te lo dan tus pacientes, que son los que valoran” en la página web de ‘Doctoralia’ a los distintos profesionales sanitarios.
“Hay 10 finalistas y el que más votos tiene pues es el que le dan como radiólogo más valorado”, explica, señalando que el primer premio de los ‘Doctoralia Awards’ lo recibió en 2021 y el segundo, en 2023, aunque dice que se lo entregaron este año.
Remartínez admite que no se esperaba que en tan solo un año fuera a ganar de nuevo este prestigioso premio y a ser reconocido con la Medalla de Oro de la Ciudad.
“Alguna vez algún amigo mío me ha dicho que me darán la Medalla de Oro algún día y yo me preguntaba ‘y a mí por qué me van a dar una Medalla de Oro?”, dice entre risas, aseverando que él tan solo intenta “hacer bien” su trabajo. “Y todavía me queda por trabajar”, apostilla.“Era una distinción que no esperaba que me la fueran a dar a mí”, recalca.
“Estaré flipando”
Remartínez admite entre risas que ha digerido “rápido” la noticia de que será reconocido con la Medalla de Oro de Melilla. “Tengo tanto trabajo que no me da tiempo ni a pensar. Me imagino que cuando esté allí recibiendo la Medalla pues estaré flipando”, dice, agradeciendo las felicitaciones que le han ido llegando desde que se conoció la noticia. “Te da emoción que se acuerden de ti para darte una distinción de este tipo. Además, cuando ves los galardonados de otros años es muy importante” subraya, recordando que en años anteriores le concedieron la Medalla de Oro a Su Majestad el Rey Juan Carlos I, al pintor Carlos Baeza, al exseleccionador de baloncesto Javier Imbroda -”tarde”, en su opinión-, y a su padre.
“Te das cuenta de que te meten en esa lista y eres como un personaje muy importante del lugar”, dice entre risas.
Sí reconoce también que, desde hace unos años, la ciudadanía le tiene afecto. “Se me acercan por la calle, me dan las gracias, te saludan, etc.”, admitiendo que muchas veces le resulta compilado acordarse del gran número de pacientes que recibe. “Yo veo a 100 o 200 pacientes todos los días, por lo que es muy complicado acordarse de todos”, agrega.
“Me encanta que la gente me quiera”, dice al final.