Para mí, siempre fue Eladio un andariego. Un nómada de calles, como el mismo se denominó en un libro de palabras entremezcladas de enseñanzas y aprendizajes.De miradas y visiones…
Maestro de escuela y alumno de escalas. De esas que solemos poner para intentar romper por un instante la inflexible gravedad que nos reduce. Lo dice él:
… En la búsqueda del verso
Peregrinajes insólitos
Emparejan a ras de suelo
Con idas y venidas por calles y recodos,
Sirven de lociones balsámicas
Pulcros sueños, y todo lo que despierte el lirismo
Que como buen melillense llevo dentro…
Pateaba como un niño su ciudad, poniendo sobre el sucio alquitrán de sus redondas carreteras, una huella infantil de hombre sin caminos
.
Con su mínimo atuendo, una imagen volátil de luz y de pobreza….
No necesito recordarle. El forma parte de mi desconocida memoria. Esa que no recuerda, que una vez existió un lugar llamado Paraíso, en el cual, los andariegos, visitaban a menudo las estrellas.
Seguro que ya está andando por ellas.
Buenos dias y buenos recuerdos
