El equipo que dirige Pepe Andújar, tras la derrota cosechada el pasado sábado, en el Lázaro Fernández, ante el conjunto murciano del Alcantarilla, se ha situado a un sólo punto del descenso, merced a la victoria del Loja ante La Garrovilla (6-1). El representante melillense en la Segunda División Femenina de fútbol sala, se coloca, tras la disputa de la 9ª Jornada, en una zona peligrosa, pues está a sólo un punto del descenso.
Bien es cierto que el resultado cosechado el pasado sábado ante el Alcantarilla (1-6) y el logrado hace dos jornadas en Murcia, ante el Roldán B (2-0), para nada refleja lo que sucedió realmente sobre la cancha,pero en el fútbol sala lo que cuenta son los goles.
A las melillenses, parece ser que les ha mirado un tuerto o, como dice Pepe Andújar en su cuenta de twitter: “El que nos haya puesto una vela negra, que se quede en su casa ya. Ya nos vale”.
Y es que el conjunto melillense tuvo ocasiones de sobra a lo largo del encuentro para llevarse la victoria holgadamente, pero cuando el balón no quiere entrar el destino se vuelve en contra. La clave del encuentro estuvo, además de en las ocasiones perdidas por el Torreblanca, cuando las murcianas se situaron 1-3 en el marcador. Entonces, el equipo local no supo jugar con la portera-jugadora, lo que permitió a las jugadoras visitantes campar a sus anchas en su parcela y aprovechar cada fallo local para conseguir un gol, que al final es lo que cuenta en el resultado.
No obstante, a las chicas de Pepe Andújar les tiene que cambiar la suerte, porque no es normal tener tanta mala suerte en un partido.
