A nivel general, las empresas de papelería piden al Gobierno reducir el IVA del 21% en material escolar básico. Buscan apoyo político para aliviar el gasto de las familias en educación
Las principales empresas de papelería y material escolar en España han solicitado al Gobierno una reducción del IVA en productos esenciales para la educación, actualmente gravados con el 21%.
Peticiones dela Asociación del Sector de la Papelería
La Asociación del Sector de la Papelería, creada para unificar el sector y dar voz a sus problemáticas, enfrenta el desafío de la alta carga fiscal sobre los materiales escolares. Desde 2012, artículos fundamentales como plastilina, cuadernos, recambios, forros de libros, blocs de exámenes, lápices, bolígrafos, gomas de borrar, calculadoras, tijeras escolares y reglas están sujetos al tipo impositivo máximo tras la eliminación de su clasificación como bienes de primera necesidad. En cambio, los libros de texto y otros materiales educativos continúan beneficiándose de un IVA reducido del 4%.
Ante esta situación, la asociación ha intensificado sus gestiones con el Gobierno para lograr una reducción del impuesto sobre estos productos básicos para estudiantes y familias. Para ello, ha diseñado una estrategia de acercamiento a los distintos partidos políticos, adaptando su mensaje a los programas de cada formación y buscando el consenso.
«Hay sectores como el de la alimentación que logran presionar para reducir el IVA, y algún partido incorpora su propuesta en su programa. La clave está en movilizarse, alzar la voz y exponer nuestras preocupaciones», señala el presidente de la asociación, Josep Buixeda. Además, compara esta iniciativa con medidas previas como el Bono Cultural, que priorizan las ayudas directas sobre las reducciones fiscales.
Informes de la UNESCO
La asociación respalda también el reciente informe de la UNESCO, que advierte sobre los riesgos de una dependencia excesiva de lo digital en la educación. Según este estudio, el uso exclusivo de herramientas digitales puede afectar la calidad del aprendizaje y el desarrollo de habilidades esenciales, por lo que se aboga por un modelo equilibrado que combine lo digital con materiales físicos. «La digitalización cubre muchas necesidades en las empresas, pero en el ámbito educativo debe coexistir con lo analógico», afirma Buixeda.
Además de la lucha fiscal, la Asociación del Sector de la Papelería trabaja en otras iniciativas clave, como su expansión a nivel europeo. Para ello, ha establecido contacto con asociaciones homólogas en Francia (UFIPA), Italia (UFC), Alemania (SPB) y Portugal, con el objetivo de unificar esfuerzos y fortalecer la presencia del sector en el ámbito europeo.
