La Asociación defiende el papel irremplazable de lo analógico en el desarrollo cognitivo y emocional del alumnado.
La Asociación del Sector de la Papelería ha manifestado su preocupación por lo que considera un abandono progresivo de los métodos tradicionales de enseñanza debido al auge de la tecnología en las aulas. Según su presidente, Josep Buixeda, “es fundamental recuperar el valor pedagógico de lo analógico: la escritura a mano, los libros físicos y la interacción personal son elementos esenciales e insustituibles para el desarrollo cognitivo y emocional de los estudiantes”.
El sector defiende una educación basada en la interacción directa entre profesores y alumnos, con materiales físicos como libros, cuadernos y lápices, en un entorno que favorezca el aprendizaje pausado, la atención sostenida y el pensamiento crítico.
A nivel internacional, algunos países están replanteando sus políticas educativas frente al impacto de la digitalización. Por ejemplo, Finlandia ha optado por una integración tecnológica gradual, en equilibrio con el desarrollo cognitivo y social de los estudiantes. Suecia, por su parte, ha revisado sus planes de digitalización para volver a dar protagonismo a los libros de texto. En Corea del Sur, tras una digitalización intensiva, se han rediseñado las políticas educativas para contrarrestar los efectos negativos sobre la salud mental de los alumnos, incorporando medidas para reducir el uso excesivo de pantallas.
Ante este panorama, la Asociación considera que el gran desafío de los próximos años será consolidar un modelo pedagógico que integre la tecnología como herramienta de apoyo, sin desplazar las metodologías tradicionales centradas en la reflexión, el pensamiento crítico y la cooperación entre estudiantes.
Desde 2020, el Gobierno de España ha promovido la digitalización educativa mediante programas como Educa en Digital, en coordinación con Red.es y las comunidades autónomas, y financiados con fondos europeos (FEDER y Next Generation EU). Esta estrategia, alineada con el Plan de Acción de Educación Digital de la UE, se concretó en el Plan de Digitalización del Sistema Educativo 2021-2027, con iniciativas como EcoDigEdu y Código Escuela 4.0, que impulsan la formación docente, el acceso equitativo a dispositivos y la enseñanza de programación desde edades tempranas.
La Asociación del Sector de la Papelería destaca que la evaluación externa de este plan, prevista para 2026, será clave para analizar con profundidad su impacto real en el aprendizaje y el desarrollo integral del alumnado. Mientras tanto, recuerda que el propio Gobierno insiste en que la digitalización debe entenderse como una herramienta complementaria para lograr una educación de calidad, inclusiva y adaptada a los retos del futuro.
