Esta será la quinta vez que Sofía Acedo concurre a unas elecciones generales por Melilla, aunque la primera que lo hace al Congreso, ya que en las cuatro anteriores, desde 2015 a 2023, ha ocupado uno de los dos escaños de Melilla en el Senado junto a Juan José Imbroda.
– No son sus primeras elecciones generales como candidata, pero sí al Congreso de los Diputados. ¿Cómo las afronta?
– Con muchas ganas, con ilusión y mucha responsabilidad. Estas son unas elecciones trascendentales, nos jugamos mucho. Llevamos muchos años en este país construyendo los cimientos de una democracia y la democracia se puede romper si no se respeta. Creo que se han cruzado todos los límites desde el Gobierno de Pedro Sánchez con Podemos, y también con sus socios preferentes, como son los independentistas, secesionistas y Bildu. Se ha arrodillado el interés general a los intereses de las minorías y eso hay que revertirlo. Creo que tenemos una oportunidad enorme el próximo 23 de julio con un candidato que tiene una experiencia acreditada en gestión, con cuatro mayorías absolutas, que tiene a España en su cabeza y que quiere trabajar por el interés general y no plegarse al interés de las minorías, que quiere devolver la prosperidad a España y quiere recuperar las instituciones y dar una estabilidad económica, social e institucional para que seamos un país próspero, como nunca debimos dejar de serlo. Ese es Alberto Núñez Feijóo y vamos a dar todo lo que esté en nuestra mano para que sea el presidente del Gobierno. Solo votando la opción del PP, solo dando una mayoría suficiente al PP, garantizamos que Sánchez salga de la Moncloa.
– Estas son unas elecciones diferentes por celebrarse en verano. ¿Cree que puede condicionar la fecha al resultado?
– Parece que el presidente del Gobierno convocó las elecciones el 23 de julio con la intención de que hubiera la menor participación posible. Nosotros salimos con mucha ilusión y vamos a recorrer todos los rincones de la ciudad para concienciar a los ciudadanos de ir a votar presencialmente o utilizando el voto por correo. La instrucción de la Junta Electoral Central garantiza una mayor limpieza en el proceso. Yo creo que los ciudadanos el 23 de julio van a votar masivamente porque es preferible perder un día de vacaciones que aguantar cuatro años más un Gobierno que ha sido malo para los intereses generales y, particularmente para Melilla, muy malos.
– Se está hablando mucho estos días de los pactos que está alcanzando el PP con Vox en otros territorios tras el 28-M. ¿Cree que pueden perjudicar a su partido este 23-J?
– Nosotros aspiramos a gobernar en solitario porque tenemos nuestro proyecto, nuestro programa y nuestra manera de entender este país. Queremos aplicarlos y representar a la mayoría de los ciudadanos. Creo que el PP es una casa grande donde cabe la mayoría de los españoles y tenemos que aspirar a que se sientan identificados con nuestro programa y nuestro proyecto y quieran participar de ello. Salimos a ganar con una mayoría suficiente que nos permita aplicar nuestras políticas.
– El PP lleva en su programa un Pacto Global por la Sanidad. ¿De qué manera puede ayudar esa medida a resolver el grave problema que tenemos en Melilla en el ámbito sanitario, con una huelga de médicos que cumple ya cuatro meses?
– En Melilla tenemos varios problemas en la Sanidad. Uno ha sido el inmovilismo durante estos años, que ha dado lugar a que otras comunidades autónomas actualizaran las condiciones laborales y salariales de los profesionales sanitarios y eso nos ha ido haciendo cada vez menos competitivos. Cuando eso ocurre, los médicos se nos van. Es muy difícil que un Gobierno sostenga cuatro meses de huelga, pero si es sanitaria la gravedad es mayor porque denota falta de interés, de compromiso y de voluntad de arreglar las cosas, sobre todo en un servicio público básico como la sanidad. No se puede banalizar como están haciendo los responsables políticos de Melilla, que se han mostrado incapaces, permanecen escondidos y son incompetentes. Creo que los cimientos están podridos y hay que acabar con ello, y hacer una apuesta importante por estas dos ciudades, porque posiblemente una sanidad y una educación de calidad sean una de las razones por las que una familia decida si quedarse o no en un sitio a vivir. O esto se acomete con responsabilidad, voluntad y compromiso de arreglarlo en los próximos meses, o difícilmente se podrán abrir las puertas del nuevo hospital. Los profesionales sanitarios saben que nuestro compromiso está encima de la mesa y lo hemos contemplado en el programa electoral.
– ¿Cuáles son las principales prioridades del PP en estas elecciones respecto a Melilla?
– Son muchas. Han sido cuatro años de travesía en el desierto con un Gobierno de CPM y PSOE y un tránsfuga que nos ha hecho retroceder a todos los niveles. Pero cinco años de Pedro Sánchez también nos han hecho mucho daño y eso se puede ver reflejado con los hechos, yendo a los Presupuestos Generales del Estado, donde nos han retirado inversiones importantes que iban a generar economía. Melilla necesita que se genere economía, que se profundice en nuestro régimen fiscal y de bonificaciones y no solo no se ha hecho nada, sino que nos han ido quitando paulatinamente algunas bonificaciones, como el problema que tenemos ahora con la retirada de las bonificaciones a las cuotas patronales de la Seguridad Social, cuyo destrozo va a ser importante.
Seguiremos trabajando en todas esas patas que se fueron poniendo a lo largo de los años de Gobierno de Imbroda, que se interrumpieron con la moción de censura a Mariano Rajoy y que se destrozaron definitivamente con los cuatro años de Gobierno de CPM y PSOE. Queremos que Melilla siga siendo una ciudad sostenible económicamente, que se abra cada día más al mundo y donde se pueda vivir en paz y en convivencia. Para eso hace falta voluntad política, pero también el Boletín Oficial del Estado con las disposiciones normativas y los Presupuestos Generales del Estado.
– ¿Cree que dará tiempo a salvar la bonificación del 50 % a las cuotas patronales de la Seguridad Social si el PP llega al Gobierno?
– Los tiempos apremian porque las Cortes se constituyen el 17 de agosto y a partir de ahí hay que empezar la ronda para buscar los acuerdos para formar gobierno. Por lo tanto, llegaremos al 1 de septiembre sin que haya constituido un Gobierno. El PSOE y Podemos lo podrían haber arreglado, todavía se han seguido sucediendo Consejos de Ministros y no han tenido voluntad de arreglarlo. La intención era clara de recaudar más y si para eso había que dilapidar una bonificación que llevaba en Melilla muchísimos años, lo hacen.
– Han sido años difíciles en las relaciones entre España y Marruecos. ¿Cómo cree que serían con un hipotético Gobierno de Feijóo?
– Feijóo dijo hace unos días que su primer viaje oficial será a Marruecos. Y lo hará teniendo claro que defenderá los intereses de España y, por tanto, de Ceuta y de Melilla. Es lo que hace falta: claridad en las ideas, voluntad y tener las mejores relaciones, pero en un plano de igualdad y con reciprocidad. En los últimos años hemos sufrido una importante hostilidad por parte del país vecino y hemos tenido un Gobierno haciendo política de manos caídas. El ministro Albares dijo en Cortes Generales que las relaciones con Marruecos se habían restablecido, de manera que sacaba de la ecuación a Ceuta y Melilla, ya que la aduana comercial, que data de 1860, sigue cerrada y el régimen de viajeros no se ha recuperado de Melilla hacia Marruecos, al contrario de lo que sucede de Marruecos hacia Melilla. Eso no se puede permitir porque Marruecos lo percibe como una debilidad y no como una defensa férrea de estas dos ciudades, que hay que defender de la misma manera que se defiende el resto del territorio. El Gobierno ha preferido dar la espalda Ceuta y Melilla y rendido pleitesía a un país tercero como es Marruecos, todavía no sabemos por qué, aunque el presidente Feijóo ha dicho que informará a todos los españoles, si el próximo 23 de julio gana las elecciones, sobre qué hay detrás de esa cesión del Sáhara Occidental.
– ¿Veremos la aduana comercial de nuevo abierta?
– Yo espero que sí. En la defensa de esos intereses, la aduana comercial española y europea que está en la frontera de Melilla con Marruecos debe volver a reabrirse. No tiene ningún sentido que exista un tráfico comercial documentado con el resto del territorio nacional y no a través de Melilla, cuando ha existido siempre. Nosotros pelearemos por ello y por todo lo que afecte a los intereses de Ceuta, de Melilla y de todo el territorio nacional.
– Sus adversarios políticos, fundamentalmente PSOE y CPM, les reprochan con frecuencia su labor como parlamentarios nacionales. Ambos partidos creen que es insuficiente y, en el caso de CPM, insisten en que no defiende los intereses de Melilla. ¿Qué les diría?
– No tienen nada que decir ni saben la labor que se ha hecho porque tampoco les ha interesado. Voy a contar una cosa que ocurrió y que nos dejó a todos anonadados, sobre todo a los parlamentarios nacionales de nuestro partido. Cuando se estaba elaborando aquí ese plan estratégico al que le dieron tanto tanto bombo y que no ha servido para absolutamente nada, se planteaban profundizar en las cuestiones fiscales y nos solicitaron a los parlamentarios nacionales que fuésemos a Madrid y que lo defendiésemos. Pero, cuando lo introdujimos en los Presupuestos Generales del Estado vía enmienda, el PSOE votó en contra, siendo la vicepresidenta del Gobierno de Melilla de ese partido. Es una muestra del descontrol y la ausencia de un proyecto de ciudad. Esos adversarios no me aportan credibilidad. Hemos defendido los intereses de Melilla con mucha vehemencia y beligerancia, y hemos puesto en más de una ocasión al Gobierno en un brete, poniendo todas las cuestiones sobre la mesa, como aduana comercial, Schengen, Unión Aduanera, Educación, inversiones en materia sanitaria, la ampliación del puerto, los proyectos fantasmas de CPM…
Nosotros venimos a abrir ventanas y a impulsar esta ciudad como lo que es: una ciudad española, europea, abierta, plural, moderna y maravillosa para vivir. Imbroda y Feijóo saben lo que hay que hacer con Melilla, quieren hacerlo y tienen una complicidad importante para poder llevarlo a cabo, además de todo el equipo del PP. A Melilla le ha ido bien con los gobiernos del PP, mucho mejor que con cualquier otro Gobierno.
– Venimos de un 28-M con Melilla puesta en el foco nacional. ¿Qué espera el PP de esta campaña del 23-J?
– Va a ser más tranquila porque con la resolución de la Junta Electoral Central sobre la identificación al votar por correo, y habiéndola hecho extensiva a todo el territorio nacional, se ha limpiado el proceso democrático que venía estando dopado en todas las elecciones de los últimos años en Melilla. Sería mentira si dijese lo contrario. En el año 2019 se pasó mal porque las elecciones fueron más dopadas que nunca y eso no se podía consentir mucho más tiempo. Creo que hemos dado un paso de gigante para que las elecciones sean limpias, transparentes y democráticas en Melilla. Eso va a condicionar toda la campaña, como ya hizo en la del 28 de mayo, y por eso no felicitamos. Con respecto a los adversarios, son los mismos que el 28 de mayo, y a los perdedores siempre les gusta embarrar, pero nosotros vamos con las ideas muy claras: tenemos un proyecto muy interesante, el mejor candidato, que es el presidente Feijóo, y vamos a llevar ese proyecto a todos los melillenses, a los que pedimos un voto exigente, que nos exijan que cumplamos con lo prometido. Por eso yo le pido a los melillenses que apoyen el 23 de julio esta candidatura, este proyecto para España con una mayoría amplia, porque eso se va a ser garantía de que Sánchez se vaya y de que el PP pueda aplicar su programa, su proyecto para toda España, en el que cabemos todos. A eso aspiramos.
“Tengo sentimientos encontrados al renunciar al acta, pero creía que debía hacerlo por honestidad con los melillenses”
– ¿Le ha costado mucho renunciar al acta de diputada en la Asamblea para presentarse al 23-J?
– Soy muy respetuosa con los ciudadanos y agradezco enormemente el apoyo masivo que nos dieron el 28 de mayo. Tengo sentimientos encontrados, pero también por ser honesta con ellos, creía que debía hacerlo. Se ha constituido la Asamblea y yo estoy inmersa en una campaña electoral para las generales. Creía que era una falta de respeto porque el voto que nos dieron la mayoría de los melillenses el 28 de mayo fue un voto de ilusión, que querían cambio y esperaban con ansia un Gobierno implicado al 100% en mejorar esta ciudad. No quiero llevarle la contraria a los melillenses y, por tanto, me tengo que centrar en la campaña de las generales. Tenemos una lista muy buena, con compañeros maravillosos que lo van a hacer igual de bien o mejor de lo que lo podría haber hecho yo. Estoy muy ilusionada con este proyecto del Congreso y lo hice por respeto a los melillenses, por honestidad y agradecimiento a ese apoyo que nos habían dado.
