“Es un disparate lo que está pasando allí”, ha valorado el presidente de la Ciudad Autónoma, que pide más implicación de España y de la Unión Europea para resolver este problema “con otras decisiones”
El presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, ha celebrado la baja presión migratoria que existe actualmente en la localidad norteafricana, que no ha registrado en lo que va de año ninguna entrada irregular.
“Está tan cerrada la frontera que se lo pone difícil para que se produzcan entradas irregulares, sobre todo en la valla”, ha explicado, señalando que la presión migratoria se ha reorientado hacia Canarias, que es “un disparate lo que está pasando allí”. “Eso es algo que hay que combatir y luchar y que hay que acabar con ello, y para eso tiene que implicarse muchísimo la Unión Europea, pedir ayuda España y tomarse otra serie de decisiones”, ha añadido.
Bajo mínimos
Melilla cerró 2024 siendo el año con menos entradas irregulares: tan solo 113, de las cuales 21 de ellas son por mar y 92 por tierra, frente a los 340 del año 2023, una de las entradas menores desde que comenzó el fenómeno migratorio en la ciudad española del norte de África a inicios de los 90, según los datos oficiales a los que ha tenido acceso Europa Press.
