Manuel Ángel Quevedo, diputado del Partido Popular por Melilla, manifestó ayer en rueda de prensa el abandono al que están sometidas las playas de nuestra Ciudad.
Tras un fin de semana caluroso, muchos melillenses han querido disfrutar de este recurso tan importante de la ciudad, que tal y como indica Quevedo, “es saludable, gratuito y nos hace a todos iguales, sin importar edad, religión o clase social”, un lugar donde disfrutar del ocio, sobre todo en “estos tiempos de pandemia”.
“Este servicio tan fundamental, tiene un retraso como nunca se ha visto en la historia. Un retraso injustificado e injustificable. Una situación desastrosa causada por una gran dejadez conforme se han ido finalizando los contratos que había dejado hechos el anterior Gobierno del PP”, asegura, puntualizando que a día de hoy, “ninguno de los cinco contratos que hacen que las playas estén en condiciones, está contratado, pudiendo causar problemas medioambientales, porque no hay contenedores de reciclaje ni papeleras, y lo que es peor, de peligro para las vidas humanas, porque a estas alturas tampoco hay socorristas”, responsabilizando tanto a la Consejería de Medio Ambiente, como al presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, a los que tacha de responsables de este despropósito.
Los contratos que no han continuado y que deberían estar ya funcionando son:
Servicio de Hamacas
El diputado del PP reconoce como lógica la opción de que en el ejercicio 2020 no se hubiesen instalado las hamacas por el tema de la pandemia, al no tener en este momento claro el modo de contagio del virus, “pero que hoy día, que se justifique que no hay hamacas por el virus es absurdo, porque ya sabemos que si hay que reforzar la limpieza, se refuerza”.
Playa para todos
Este es el segundo contrato, donde los jóvenes de Aspanies, del Centro Asistencial, Gámez Morón, TEAMA, etc. que atiende a unos treinta o cuarenta chicos en turnos de mañana y tarde, que disfrutan de actividades en la playa los meses de julio y agosto, se mantuvo hasta el 2020 por un contrato que se realizó en la etapa del PP y que en este 2021 no se ha licitado, desconociendo si es que no se va a sacar o lo harán en unos días, “donde ya llegarán tarde”.
Servicios Marítimos
Donde se ponen los balizamientos y las redes para que no pasen las medusas o la suciedad y donde la embarcación ‘limpiamar’ está limpiando constantemente la zona para que no lleguen plásticos y deshechos a la zona de bañistas, que como el anterior, funcionó con el contrato del PP hasta el 2020 y que han licitado hace poco donde únicamente se ha presentado una empresa con cinco meses de vida y que nunca ha realizado este servicio, a la que Quevedo indica tener muchas dudas sobre su solvencia técnica y económica para llevar a cabo este proyecto y a la que el viernes pasado la Administración competente le dio un plazo hasta el 31 de mayo para presentar papeles. Al parecer, la licitación de una única empresa es debido a que el contrato económicamente es insuficiente. Insistiendo en que en el mejor de los casos, “no será hasta el mediados de junio que este servicio esté contratado, que será cuando se comience a poner dichas redes y balizamientos”.
Servicios terrestres
Los que se encargan del movimiento de arena, que la arrastran desde la Hípica, donde se acumula, hasta las playas que se quedan sin ella, como la del Hipódromo.
También se encarga de la colocación de sombrillas, pasarelas, limpieza de orillas, contenedores de basura, carteles, etc.
En este caso, el 11 de mayo, la Ciudad le concede hasta el 26 del mismo mes, a la empresa Taler (propuesta como adjudicataria), para que presente los documentos y la fianza, con lo que el contrato no estará realizado hasta junio, no comenzando las actuaciones hasta mediados de dicho mes.
Socorrismo
Es el más importante de todos y que depende directamente del presidente de Melilla. En este caso, aclara Quevedo, “el contrato que tenía el PP con la empresa adjudicataria terminó en el año 2019, que en 2020, prorroga el actual Gobierno y anula el 20 de mayo, sacando un nuevo contrato a principios de diciembre, que vuelven a anular el día 30 del mismo mes. En febrero, de nuevo, sacan un pliego donde se intenta pagar a los socorristas un sueldo inferior al que dicta su convenio colectivo y que luego se aumenta en un 2%, dando lugar a que una de las empresas lo denuncie al Tribunal Central de Recursos Contractuales, quedando este servicio actualmente suspendido por los tribunales y que, en el mejor de los casos y suponiendo que a la Ciudad le den la razón, podría estar listo a principios de julio. En el peor de los casos, volverían a realizar uno nuevo que les llevaría al mes de octubre, por lo que la Ciudad se quedaría sin socorristas este verano.”
