El nuevo balance de criminalidad publicado ayer en la Web del Ministerio del Interior arroja un crecimiento parcial de algunas tipologías delictivas en Melilla a causa, principalmente, de la inclusión, en este tercer balance, tanto de las infracciones penales recogidas en el Código Penal anterior a la reforma, como de las nuevas infracciones en vigor desde el 1 de julio del presente año, según la información facilitada por la Delegación del Gobierno en Melilla. La Delegación del Gobierno ha indicado que asimismo tiene que añadir el efecto estadístico resultante de la modificación que, desde septiembre pasado, se ha introducido en los indicadores de criminalidad utilizados por la Oficina Estadística de la Unión Europea (EUROSTAT) para hacerlos coincidir con los de Naciones Unidas.
En concreto, el principal aumento se sucede en el apartado de delitos y faltas, con 150 casos más que en la comparativa con el mismo período de 2014 "a causa, como decimos, del doble registro de infracciones penales" recalca la portavoz gubernamental. Los hurtos, también aumentan especialmente, con 144 casos más, fundamentalmente por el mayor número de denuncias por sustracciones de móviles.
En el resto de apartados, "a pesar de lo aparentemente abultado del incremento en los porcentajes", subrayan desde Delegación, los aumentos "son mucho más escasos: de 18 más en el de robos con violencia e intimidación; de 13, en el de robos con fuerza en domicilio; y de 12 más en el apartado de daños".
Aún así, ni los nuevos criterios, ni la dificultad inicial para distinguir los delitos leves de los menos graves y graves, impiden subrayar que Melilla sigue manteniendo un índice de criminalidad de -6,6 puntos respecto de finales de 2011.
De hecho, Melilla cierra el tercer trimestre del presente año con un 56,4 de infracciones penales por cada mil habitantes, como decimos 6,6 puntos menos que en 2011, año en que el balance final concluyó con un 63,0 de tasa de criminalidad.
Igualmente, hay que destacar el alto índice de eficacia policial que ha seguido en aumento en este tercer trimestre, tras incrementarse las detenciones en un 10% (un 54% más en lo relativo a presuntos autores de sustracciones en el interior de vehículos) y situarse en más de un 67% el porcentaje de delitos esclarecidos.
No obstante lo anterior, a juicio del delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, “los datos siguen reflejando la necesidad de continuar trabajando por un mayor aumento de los niveles de seguridad, a fin de seguir distanciándonos de la tasa de criminalidad con que se cerró 2011 y aproximarnos cada vez más a la medida nacional, que en este tercer trimestre se ha situado en un 43,8”.