Nadie imaginaba que a estas alturas de la competición, sobre todo después del mal comienzo de los de Carlos Campos, debido, como de todos es sabido, a los problemas por lo que atraviesa el equipo, que prácticamente no ha realizado pretemporada, que que el Melilla Fútbol Sala se encontrase en la octava jornada en el octavo puesto de la tabla, a un punto de los play offs de ascenso y con cuatro victorias y otras tantas derrotas.
Y es que la corta plantilla con la que cuenta está haciendo un gran esfuerzo para que el equipo continúe adelante y compita con dignidad en la Segunda División.
Por otro lado, Carlos Campos está dando confianza, aunque no le queda otra, a los canteranos, que están comenzando a disfrutar de minutos y a marcar, como es el caso de Mohtar, que el pasado sábado logró su primer gol con el conjunto melillense.
El equipo, que duda cabe, que no está pensando en los play offs, pues el principal y único objetivo del club es mantener la categoría, pero el trabajo que se desarrolle a lo largo de la temporada, marcará los objetivos finales.
Por otro lado, la incomparecencia del F.S. Zamora en la pista del Gran Canaria, aduciendo una intoxicación alimentaria de siete de sus jugadores, parece la muerte anunciada del equipo zamorano en la Segunda División, pues ya fue sancionado con la pérdida de dos puntos por no hacer frente a los derechos de arbitraje durante tres jornadas. Parece ser que los problemas económicos acucian al equipo castellano leonés, por lo que podría tener los días contados en la categoría.