El Melilla Balonmano Virgen de la Victoria continúa en pleno desplome y sin capacidad de reacción, tras encajar este sábado su tercera derrota consecutiva del campeonato, esta vez frente al BM. Sanse (26-29), en un partido que confirmó su mal momento tras quedarse sin opciones matemáticas de disputar el Play-Off de ascenso hace dos jornadas.
No obstante, el conjunto dirigido por Juan Martín del Boca comenzó bien, como así lo reflejan los parciales de 1-1, 7-2, 9-3 y 10-5, que hacía pensar en un posible cambio de dinámica. Pero el espejismo duró poco, ya que el BM. Sanse recortó distancias hasta voltear el marcador antes del descanso, con unos marcadores de 10-8 y 12-13.
A pesar de los 8 goles de Luciano Flores, el más destacado del cuadro local, los errores en momentos clave y la falta de firmeza defensiva acabaron pasando factura en los melillenses, aunque intentaron reaccionar en la segunda mitad, logrando incluso ponerse por delante (19-17), pero no supieron mantener la ventaja ni frenar el empuje visitante en los minutos decisivos, y a partir de ahí, el conjunto madrileño impuso su ritmo ante un conjunto local que cedió el partido tras unos parciales de 21-22, 22-25 y 26-29.
Con esta nueva derrota, el Virgen de la Victoria afronta el parón de Semana Santa hundido en lo anímico y sin más objetivo que cerrar de la manera más digna posible una temporada que se ha torcido por completo, sobre todo tras la baja de su máximo goleador Santi Bedoya, que tuvo que pasar por el quirófano por una operación de apendicitis.
El próximo compromiso será el 26 de abril, en la penúltima jornada del Grupo F de la Primera División Estatal, visitando al San Francisco de Asís de Mijas, en el Pabellón Las Cañadas (1900 horas).
