El Gobierno de Melilla considera “un absoluto disparate” la pretendida derogación de la Ley de Seguridad Ciudadana, incluidos los rechazos en frontera ante los intentos de entrada irregular de inmigrantes, ya que esta norma “lo que hace es dar seguridad jurídica a la actuación de las Fuerzas de Seguridad del Estado”. A preguntas de los periodistas, el portavoz de la Ciudad Autónoma, Daniel Conesa, se refirió así a la aprobación la semana pasada en la Comisión de Interior de la derogación de la Ley de Seguridad Ciudadana, apenas un año después de que entrara en vigor con la disposición que reformaba la Ley de Extranjería.
Conesa puntualizó que por el momento, “la derogación no es tal” porque lo que se ha aprobado en el Parlamento es una proposición no de Ley, que contó con el voto en contra de los diputados de Ciudadanos (C’s) y el PP, lo cual no tiene consecuencias legislativas porque actualmente el Gobierno está en funciones “y no se va a proceder” a esa propuesta.
“Otra cosa sería que, transcurridas unas nuevas elecciones, veremos a ver qué pasa, el Gobierno resultante tramitara un proyecto de Ley derogatorio o modificatorio de una Ley”, aclaró Conesa, según el cual esto sí tendría consecuencias respecto a la normativa vigente en la actualidad en los perímetros fronterizos de Ceuta y Melilla.
De todos modos, insistió en que la Ciudad Autónoma opina que es “un disparate” que se pretenda modificar una normativa que da más seguridad jurídica a las Fuerzas de Seguridad del Estado en su actuación en la frontera.
La semana pasada, el PP de Melilla mostró su oposición a la derogación de la Ley de Seguridad Ciudadana, incluidos los rechazos en frontera ante los intentos de entrada irregular de inmigrantes, porque eso generará “un efecto llamada” y será “alarmante e inquietante” para Melilla.
