El consejero de Educación, Miguel Ángel Fernández, considera “legítima” esta propuesta siempre y cuando “prevalezcan los derechos y la protección del menor y de sus datos”
El Gobierno de la Ciudad Autónoma de Melilla ha comunicado que estudiará la posibilidad de instalar cámaras de videovigilancia en los distintos centros educativos de la ciudad para prevenir casos de maltrato infantil. Una medida que ha reclamado recientemente la Asociación de Autismo de Melilla (TEAMA) a la Dirección Provincial de Educación de una manera “progresiva y regulada”, y surge tras un caso de maltrato en una guardería de Torrejón de Ardoz (Madrid), donde una trabajadora agredía a niños.
“Hay que ver en qué punto está la normativa y hasta dónde se puede llegar”, ha afirmado el consejero de Educación, Miguel Ángel Fernández, que considera “legítima” esta propuesta siempre y cuando “prevalezcan los derechos y la protección del menor y de sus datos”. “Lo estamos estudiando desde el departamento jurídico de la Consejería y, desde luego, vamos a tomar las medidas que consideremos más correcta, pero siempre haciendo prevalecer los derechos del menor y la protección de sus datos”.
“Algo nimio”
A preguntas de los periodistas, Fernández ha quitado hierro a este asunto diciendo que el caso de agresión a un niño en una guardería “suele pasar cada X tiempo” y que suele ocurrir porque “se dan muchísimas circunstancias”.
“Ha sido un caso en toda España, y que, si tenemos en cuenta las probabilidades y las estadísticas, es algo nimio”, ha señalado, reconociendo que, cuando sale a la luz pública, “se genera esta alarma”.
“Pero, realmente, hay que poner los pies en la tierra, ver con sensatez y, sobre todo, con respaldo jurídico, ver qué decisiones se pueden adoptar y cuáles no ateniéndonos a la protección de datos y derechos del menor”, concluye.