La Delegación del Gobierno en Melilla ha elevado a 20 los miembros de la Guardia Civil heridos este martes tras abortar el intento de entrada de unos 150 migrantes subsaharianos y marroquíes que esgrimieron palos y piedras contra los agentes que se pusieron en su camino.
Según ha informado un portavoz de la institución que representa al Ejecutivo Central en la ciudad, “salvo complicaciones se tratarían de contusiones y el pronóstico de todos ellos es leve”, aunque ha admitido que a seis de ellos “se les ha dado la baja médica”.
Los hechos se han registrado a las 5.15 horas de este martes cuando un grupo de más de 150 personas a la carrera han intentado bordear el Dique Sur, pero todos ellos fueron rechazados por la Policía Nacional, y la colaboración activa de las fuerzas de seguridad de Marruecos.
La Delegación del Gobierno en Melilla, que asegura que ningún migrante ha podido pasar finalmente a la ciudad española, ha destacado que la intentona ha estado marcada por “la violencia utilizada por los migrantes que portaban palos y al lanzamiento de piedras”, que se ha saldado con veinte agentes heridos leves, seis de ellos requiriendo la baja médica.
Entre el numeroso grupo, la mayoría eran migrantes subsaharianos, aunque también han participado magrebíes, ha señalado el portavoz gubernamental.
