Prácticamente al mismo tiempo que las Cortes Generales estaban proclamando a Felipe VI, el Gobierno de Melilla quiso transmitirle su felicitación sincera a través de su vicepresidente primero, Miguel Marín, que deseó “el mayor de los éxitos” al nuevo Rey porque “también serán los éxitos de España y de todos los españoles”. Marín, en rueda de prensa, mostró el convencimiento del Ejecutivo melillense de que Felipe VI continuará con la senda de trabajo de su padre, el Rey Juan Carlos, en cuya etapa España ha logrado ser “uno de los países más prósperos, desarrollados y con mayor bienestar del mundo”. Según dijo Marín, esto ha sido “principalmente gracias a la figura del Rey”, que acaba de pasar página a su reinado de 39 años.
Por ello, el número dos del Gobierno local quiso mostrar el “eterno agradecimiento” de la Ciudad Autónoma tanto a Don Juan Carlos como a Doña Sofía “por el magnífico trabajo que han realizado a lo largo de estos años”.
