El gobierno local ha comunicado que finalmente no seguirá adelante con su iniciativa de municipalizar el servicio de transporte público. Se necesita inversión para adquirir autobuses nuevos, pero la recaudación proveniente del billetaje y la subvención de la ciudad autónoma está siendo insuficiente para abordar estos gastos. Ante la posibilidad de la salida del sistema de transporte urbano a concurso público, desde la COA admiten que, bajo las condiciones actuales, no serían capaces de hacer frente a otras empresas interesadas. La elevada deuda de la COA hace necesaria una “quita” para poder seguir operando en el futuro.
El secretario general de la COA, Antonio Montoya, afirma que el gobierno local ha comunicado que finalmente no seguirá adelante con su iniciativa de municipalizar el servicio de transporte público por resultar «imposible», aunque afirma que todavía existe la posibilidad de aplicar «otros métodos» de entre los que cita la constitución de la COA como «empresa mixta».
Con respecto a la situación financiera actual de la COA, Antonio afirma que «es mala, puesto que se necesita inversión para autobuses nuevos, que sean más atractivos para el usuario» y actualmente dicha inversión no es posible, dado que la recaudación proveniente del billetaje y la subvención de la ciudad autónoma está siendo insuficiente para abordar estos gastos. Antonio reconoce que, incluso contando con la última subida de precio del billete (5 céntimos), la situación económica no tiene visos de mejorar, debido a que dicha subida de precio del billetaje seguramente conllevará un descenso en el número de pasajeros que utilizan el servicio.
Ante la futura posibilidad de la salida del sistema de transporte urbano a concurso público, desde la COA no tienen noticias de que vaya a producirse tal situación y prefieren no especular, si bien admiten que «se buscaría cualquier otra vía que no fuera el concurso público» puesto que, bajo las condiciones actuales, no serían capaces de hacer frente a otras empresas interesadas, puesto que acumulan «un déficit de más de un millón de euros». Según el secretario general, para que la COA pueda seguir operando sería necesaria la negociación de una «quita» con el Ayuntamiento, a fin de eliminar las «pérdidas acumuladas, principalmente del año 2007, que se encuentran en proceso contencioso administrativo con la Ciudad Autónoma» para «poder luchar en igualdad de condiciones con otras empresas que vengan de fuera».
El transporte público melillense, tras la última subida anunciada, se sitúa 31 céntimos por debajo del coste medio del billete de bus urbano a nivel nacional (1,21 euros).
En definitiva, todo parece indicar que el desequilibrio económico de años anteriores imposibilitaría que la COA pudiera seguir ofreciendo sus servicios en Melilla en el caso de que se abriese un hipotético concurso público. Ante tal situación, Antonio apela al largo recorrido de la COA como empresa melillense, «desde 1918, con casi 100 años de historia» reclamando «que se acuerden de esta empresa de toda la vida».
El transporte público melillense, de los más baratos de España.
A pesar de la última subida de precio anunciada (en el BOME del jueves pasado), que situaba el precio del transporte urbano en 0,90 euros con motivo de la compensación necesaria tras la aplicación del cobro del “quebranto de moneda”, el transporte público melillense sigue siendo uno de los más baratos de España, situándose más de un 25% por debajo del coste medio de los servicios de bus urbano.
