Ayer tarde se constituyó el comité especial para la gestión del ébola que promueve el Gobierno y que involucra a varios ministerios. Lo preside la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría con el objetivo de coordinar la "respuesta sanitaria a un problema que genera incertidumbre a la sociedad" y actuar con "transparencia", según declaró. En ese comité, que se reunirá como mínimo una vez al día, están representados diferentes ministerios, representantes de la Comunidad de Madrid y el Complejo hospitalario La Paz-Carlos III de Madrid, la ministra de Sanidad, Ana Mato, y miembros de su equipo; un representante de los ministerios de Exteriores y Cooperación, Interior, Defensa, Presidencia, Economía y Competitividad (a través de la secretaria de Estado de I+D), Justiciay miembros del Gabinete del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Su objetivo, coordinar los medios y recursos disponibles; promover cooperación interinstitucional e internacional; establecer protocolos de política informativa para ofrecer la "máxima transparencia", y analizar la planificación existente para el control de la enfermedad. Dicho comité se verá apoyado por un comité científico que se constituirá "inmediatamente".