El próximo comisario de Inmigración y de Interior, el conservador griego Dimitris Avramopoulos, ha rechazado este martes durante su audiencia de confirmación ante la Eurocámara la idea de una "Europa fortaleza", pero ha defendido crear un cuerpo de guardafronteras de la UE y acelerar las repatriaciones para combatir la inmigración irregular. La creación del puesto de comisario de Inmigración es una de las novedades del equipo del presidente electo de la Comisión, Jean-Claude Juncker, para marcar la prioridad que prestará a esta cuestión durante los próximos 5 años. Para Avramopoulos, el espacio sin fronteras Schengen "es uno de los mayores logros de la integración europea y tenemos que mantener la ausencia de controles en las fronteras interiores". "Una precondición para que no haya controles internos es tener un control eficaz de las fronteras exteriores sin hacer de Europa una Europa fortaleza", ha resaltado el ex ministro de Defensa griego. "Aunque los Estados miembros son responsables de controlar su sección de la frontera externa, la capacidad de FRONTEX (la Agencia de la UE de Control de Fronteras) debe usarse plenamente para garantizar la solidaridad europea", ha reclamado el próximo comisario de Inmigración. Pero además, Avramopoulos ha defendido "abrir un debate sobre el desarrollo a largo plazo de FRONTEX y la necesidad y la viabilidad de crear un sistema de guardias de frontera auténticamente europeo".