Una de las sorpresas del pleno de ayer llegó justo al final, en el último punto del Orden del Día, sobre el contrato para la gestión del vertedero de inertes. Cuando el secretario general de la Asamblea llevaba un rato leyendo el dictamen, el presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, le interrumpió para hacerle saber que había una propuesta de CPM para retirar dicho punto, el cual había sido aprobado en julio en comisión.
El consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad, Hassan Mohatar, intervino brevemente para explicar que ello se debía a que se va a modificar el tiempo de duración de este contrato, de manera que en vez de tener un plazo de cinco años, que requiere que la Asamblea le dé el visto bueno, tendrá una vigencia de cuatro, prorrogable año por año, de modo que la tramitación para su adjudicación pasará directamente a la Consejería de Hacienda.
El PP pidió intervenir, pero De Castro no lo permitió alegando que, según el Reglamento, tras esta breve motivación había que pasar directamente a la votación de la retirada del punto. El PP votó en contra, Vox se abstuvo y los tres partidos del Gobierno (CPM, PSOE y Cs), además del diputado Jesús Delgado, votaron a favor.
