El Club Voleibol Melilla encajó por primera vez la segunda derrota consecutiva del campeonato ante un rival de su liga particular, el C.V. Mediterráneo de Castellón, que sigue siendo la ‘bestia negra’ de los melillenses. Con esta ya son cuatro las victorias de los levantinos -tres en la Liga y uno en la Copa del Príncipe- ante el conjunto que entrena Salim Abdelkader, que cayeron derrotados en el ‘tie-break’, tras ganar el primer y el tercer set, mientras que en la última manga desaprovecharon dos bolas de partido que remontaron los castellonenses para adjudicarse una importante victoria por 2-3. El equipo que dirige Santi López protagonizó en el Pabellón de Deportes Javier Imbroda Ortiz una gran remontada y así sumar el segundo triunfo de la Superliga. La aportación de Nestor Alberto González fue clave, ya que logró reactivar al conjunto castellonense y superar la fortaleza del Club Voleibol Melilla tras el primer y el tercer set con los puntos decisivos de Mario Gonçalvez y Aitor Canca. Sin embargo, los visitantes no se descompusieron, pese a la lesión del receptor-atacante David Mata y forzaron un ‘tie-break’ de infarto en el que también remontaron.
El partido comenzó muy cómodo para los melillenses, que fueron muy superiores, con una gran recepción y un excelente bloqueo, pese a que los levantinos ganaban por 9-11. El técnico local solicitó tiempo muerto y el Club Voleibol Melilla despegó en su juego para situarse con un contundente 23-16, concluyendo el primer parcial por 25-18.
En el segundo set llegó la relajación de los de Salim Abdelkader y el equipo de Santi López lo aprovechó para situarse con una clara ventaja de 5 puntos, pero pese a la leve reacción de los melillenses no tuvo problemas para vencer por 23-25.
En el tercer parcial, el Club Voleibol Melilla no dio opciones al Mediterráneo desde el inicio, llegando a disponer de una diferencia de 5 puntos (12-7). La lesión del visitante David Mata pasó factura en el Mediterráneo y los locales lo aprovecharon para ampliar la renta hasta los 7 puntos (18-11), logrando sentenciar por el resultado de 25-19.
Era el momento de sentenciar el partido, pero no fue así porque de nuevo la relajación volvió a aparecer en los locales. Parecía que iba a ser un paseo, pero fue todo lo contrario. Los castellonenses renacieron en su juego, con una excelente recepción y una gran pegada en ataque, logrando vencer con holgura por 18-25.
Los dos equipos se la jugaron en la ‘muerte súbita’. Comenzó muy bien el Club Voleibol Melilla, marchándose con ventaja de 6-3 y 11-9. Todo lo tenía a su favor, pero llegaron los errores e incluso su rival remontó hasta el 12-13. Reaccionó de nuevo el cuadro melillense para disponer de dos bolas de partido (14-13 y 15-14), pero de forma increíble llegaron de nuevo los fallos y su oponente dejó ‘helada’ a la grada con una victoria in extremis de 16-18.
