El ciclo sísmico que sufre Melilla ha llevado a algunos centros educativos a realizar simulacros con sus alumnos para que sepan cómo deben reaccionar ante un temblor de tierra. Si el martes lo pusieron en práctica los alumnos de Primaria del Colegio Nuestra Señora del Buen Consejo, ayer hicieron lo propio en el CEIP Anselmo Pardo. Alumnos y profesores lograron evacuar el centro en poco más de tres minutos ante un hipotético seísmo.