El autor Antonio José Carmona Pérez (Melilla, 1958) se ha proclamado ganador en los géneros de Poesía y Cuento de los Premios Tiflos de Literatura 2021 que anualmente convoca la ONCE, en su categoría especial para escritores con discapacidad visual.
El autor melillense ha ganado esta XXXV edición del Tiflos de Poesía por la obra ‘Rosa de la memoria’, y la XXXII de Cuento por ‘Purgatorio’.
Sobre el poemario, Mª Ángeles Pérez, autora que ha formado parte del jurado, explica que “desde ese título tan hermoso, ‘Rosa de la memoria’ es una obra que apela a la posibilidad de la poesía como un vínculo, como un espacio que nos trasciende y es capaz de llevarnos a cualquier lugar”.
En relación a la obra ‘Purgatorio’, la escritora Fanny Rubio, miembro del jurado, declara que “personalmente me ha llamado la atención la capacidad de narrar de alguien que te observa imaginariamente, que te interpreta a través de su experiencia, del dolor y de la memoria pero también del presente”.
Carmona, ciego total, vivió en Melilla hasta los 17 años, aunque se siente muy vinculado a la ciudad autónoma. “Soy un hombre de asperón, sigo ejerciendo de melillense, es mi patria, y lo llevo a gala”, afirma rotundo. Después de haber vivido en Ibiza, Madrid y Santander, reside en Tenerife desde 1989. La obra ganadora en Poesía es precisamente un guiño personal que ha dedicado a los paisajes melillenses. “Es la plasmación del período que va desde finales de los 60 a principios de los 70 -explica-. Versos que están sujetos a este territorio, aunque con vocación universal, que reflejan un imaginario melillense con los recuerdos y viviencias mías y de la ciudad que conforman el alma melillense. Todos los melillenses soñamos con esos paisajes”, sostiene Carmona.
El cuento que ha resultado también ganador en la modalidad de escritores con discapacidad visual lo comenzó hace doce años. “Ha tenido diferentes recorridos y ha sufirdo diferentes transformaciones, ha sido un parto de más de once años, no creo que vuelva a escribir algo sementaje”, reconoce. “Es una mezcla de experiencias personales y ficción y narra dos planos distintos con vasos comunicantes entre ellos sin solución de continuidad en la vida real y en una supuesta vida en un purgatorio”. Para Antonio José Carmona, escribir es su vida. “Es una forma de vivir”, concluye.
