La Guardia Civil ha detenido en Melilla a un individuo acusado de favorecer la inmigración irregular tras localizar a siete migrantes —uno de ellos menor de edad— ocultos en el interior de una embarcación que pretendía desembarcar en la zona norte de la ciudad, próxima a la frontera con Marruecos.
Según informó este viernes un portavoz de la Comandancia de la Guardia Civil en Melilla, los hechos ocurrieron en la tarde del pasado 29 de junio, cuando el dispositivo de vigilancia de costas y fronteras detectó una embarcación de recreo realizando maniobras sospechosas en la costa melillense, concretamente en la zona de Aguadú.
Tras activar el Equipo de Natación, Intervención y Rescate (NIR) para interceptar e identificar la embarcación, los agentes inspeccionaron su interior y localizaron ocultos en un pequeño habitáculo a cinco personas indocumentadas. Posteriormente, se comprobó que en total eran siete los migrantes a bordo, uno de ellos menor de edad.
Durante las labores de inspección y traslado, los agentes percibieron un fuerte olor a gasolina y detectaron una fuga de combustible en la sentina de la nave, con un nivel de carburante acumulado de unos diez centímetros, lo que suponía un grave riesgo para la integridad física de los ocupantes. Ante la situación de peligro, la Guardia Civil procedió a evacuar a todas las personas a bordo de la embarcación oficial y dirigirse al puerto.
Una vez en dependencias oficiales, el patrón de la embarcación fue detenido como presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros. La embarcación interceptada, que tiene base de estacionamiento en Melilla, fue trasladada a la base del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) para su plena identificación.
La actuación se enmarca en los cometidos de prevención de la inmigración irregular que la Guardia Civil desarrolla de forma permanente en la costa melillense.
