El jefe de la Brigada de Extranjería y Fronteras de la Policía Nacional en Ceuta, Ramón Caudevilla, fue destituido el pasado domingo de su cargo, justo el día en que un diario local publicó una entrevista suya en la que declaraba –en contra de la tesis que defiende el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz– que detrás de los masivos asaltos a la valla no hay mafias organizadas. "Es más un movimiento impulsivo de los inmigrantes", declaró el ahora exjefe de Extranjería a la prensa ceutí. A pesar de la coincidencia entre la entrevista y la destitución, el delegado del Gobierno en Ceuta, Francisco Antonio González, intentó ayer cortar de raíz cualquier polémica y dijo que la medida obedeció a argumentos "operativos", y que no hubo "intervención política" en la decisión. "Yo creo que no –contesta Caudevilla cuando el periodista le pregunta si detrás de las avalanchas existe "realmente un pago, un control de grupos organizados"–. Es más un movimiento impulsivo de los inmigrantes –continúa–. Vamos a ver, si entendemos como mafia un grupo organizado, es imposible que exista un grupo organizado que pueda manejar tantas nacionalidades y dentro de cada nacionalidad cada tribu. Es imposible. Estos movimientos obedecen a una unión, a un vamos a ponernos de acuerdo para hacer esto a ver si nos sale bien, nada más". Luego dice que "el inmigrante llega por sus propios medios a Marruecos", y que "quien diga lo contrario está equivocado". "Solo en el caso de la trata de mujeres subsaharianas podemos hablar de grupos criminales". Otras fuentes policiales, según Europa Press , señalaron que las apreciaciones de Caudevilla "no concuerdan con ninguno de los informes realizados por la Comisaría General de Extranjería, la Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF), el CNI, los operativos exteriores de la Guardia Civil, las sedes consulares o las autoridades de Marruecos".