El C.D. Gimnástico Melilla vio frenada ayer sábado su racha positiva de tres victorias consecutivas con una justa derrota ante el BM. Montequinto por el resultado de 21-27, en un partido igualado en la primera mitad, pero que se resolvió en la segunda parte, producto de los numerosos errores y precipitaciones en ataque del cuadro local. Faisal Salmi, entrenador del equipo local, alineó de salida a David Enríquez, Simao, Alexander (1), Oscar (4), Yusef (3), Reduan (1) y Brahim (7). También jugaron David Álvarez (4), Martín, Yunes, Ahmed y Salva (1).
El primer tiempo fue bastante intenso y emocionante para el espectador, con dos equipos que mostraron lo mejor de sí, tanto en defensa como en ataque. Los dos conjuntos imprimieron un gran ritmo al contragolpe, pero no eran capaces de despegar en el marcador, ya que el juego fue bastante parejo, así como en el marcador, con parciales ajustados, cada cinco minutos, de 0-2, 3-4, 5-6, 7-7, 9-8 y 10-12, resultado con el que se llegó al descanso.
Sin embargo, el equipo de Faisal Salmi tiró por tierra en la reanudación todo lo bueno que había demostrado en el primer tiempo. Los melillenses cometieron numerosas precipitaciones en ataque, muy atascado y anárquicos en cada una de sus acciones.
Eso lo aprovechó a la perfección el segundo clasificado del Grupo F de la Primera División, que al contragolpe hacía mucho daño, consiguiendo aumentar las diferencias conforme avanzaba el juego.
Los locales no encontraban soluciones y además se reiteraban en sus errores en ataque, posición en la que Brahim y Yusef no estuvieron afortunados, al igual que Alexander, muy lento de espaladas a la portería sevillana, mientras que David Álvarez apenas se prodigó en sus lanzamientos a puerta.
Los andaluces jugaron a placer y ampliaron sus parciales en 12-14, 14-17, 16-19, 17-20, 19-25 y 21-27, resultado con el que se llegó al final de la contienda.
