El Ministerio de Defensa ha iniciado obras en la antigua Residencia Militar de Oficiales sita en la calle General de Astilleros a requerimiento de la Ciudad Autónoma con el fin de dotar de mayor seguridad al edificio. Así, desde el Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (Invied), propietario del edificio, se están tapiando los accesos y realizando actuaciones para evitar desprendimientos. El Ministerio de Defensa, a través del Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa (Invied), propietario de la antigua Residencia Militar de Oficiales, ha iniciado varias obras en el inmueble a requerimiento de la Ciudad Autónoma.
En concreto, según fuentes del Ministerio de Defensa, se están aplicando "medidas correctoras" para dotar de seguridad del edifico tras varios incidentes en el interior, donde se alojan personas sin techo.
Con estas actuaciones se pretende evitar desprendimientos en el edificio así como que se alojen personas, tras producirse varios incendios en el inmueble, el último, el pasado 25 de diciembre cuando un torreón del edificio salió ardiendo y los bomberos tuvieron diversas dificultades para poder acceder al edificio dado el estado en el que se encuentra.
Cabe recordar que desde Defensa se ha solicitado a la Ciudad el inicio del expediente para la declaración de ruina del edificio y posterior demolición. Sin embargo, simultáneamente por parte de la Consejería de Cultura se ha solicitado al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte (MECD) declarar el edificio Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de monumento.
Aún así, según recoge el anexo publicado en el Boletín Oficial de la Ciudad Autónoma de Melilla (BOME), el edificio está en un estado de conservación "pésimo" y ha desaparecido parte de la balaustrada sobre el muero exterior de cerramiento, así como las tres puertas en el cuerpo central de la fachada.