El presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, cree que puede producirse un “problema y grave” cuando, en vez de 200, sean 2.000 los inmigrantes que salten la valla. Esto, dijo, se debe al “efecto llamada” por “criminalizar” a la Guardia Civil. El presidente Juan José Imbroda se refirió ayer al problema migratorio que padecen Ceuta y Melilla. "Cuando en vez de 200 inmigrantes ilegales sean 2.000 los que salten, podemos tener problemas y graves", indicó, y afirmó que se ha producido un "efecto llamada" con "tanta crítica, tanto culpar y criminalizar a la Guardia Civil".
El presidente lamentó que la "extrema izquierda y la izquierda que ha estado gobernando, el PSOE" critique ahora la forma en la que el Instituto Armado está defendiendo la frontera, y aseveró que "esto puede ser un día una hecatombe".
"Me preocupan Melilla y los melillenses, me preocupa España y después Nigeria y Somalia", dijo Imbroda, que abogó por que la inmigración sea "regulada y ordenada". Por ello, instó a la Unión Europea a que acuda a los países origen de la inmigración y la regulen. "Lo que no me pueden pedir a mí es que desde Melilla solucionemos el problema de Nigeria, Camerún y Zambia".
En otro orden de cosas, Imbroda se refirió la informe de 2013 de la defensora del Pueblo, y manifestó que las instalaciones que hay en la ciudad para los menores extranjeros no acompañados "están bien". "De La Purísima ha salido gente con profesión e incluso chicos que han estudiado carreras", señaló el presidente que, aunque consideró que "se podrá mejorar más", hizo hincapié en que "se hace muchísimo".
