El sindicato se quejó de que esta situación está ocasionando cierto trastorno al funcionamiento normal de las clases: “Una clase ha tenido que ser trasladada a primaria y la otra se tiene que impartir en el patio”. El sindicato de educación CSI-F denunció ayer mediante una nota de prensa las condiciones “tan paupérrimas en las que se encuentran las maestras y los alumnos de dos clases de infantil”. Según lamentó, dos clases del CEIP León Solá están “totalmente inutilizadas” desde el pasado mes de febrero. Se trata de un aula para los alumnos de 5 años y otro aula de psicomotricidad.
Según se expuso, ambas clases están ubicadas debajo de un cuarto de baño. “El problema es que el techo de las dos clases de infantil se ha venido abajo por las pérdidas de agua que se producen en el baño”.
Al respecto, CSI-F subrayó que “han transcurrido más de dos meses y medio y aún no han solucionado absolutamente nada”. Por ello, el sindicato exige que esta situación se solvente cuanto antes “por el bien de los compañeros, de sus alumnos, por su seguridad y porque tienen que tener unas condiciones adecuadas para que la enseñanza tenga un mínimo de calidad”.
