Ciudadanos (C’s) criticó ayer el nombramiento de la nueva gerente del Instituto de las Culturas, María del Carmen Pardo, porque a su juicio es “una falta de respeto a la oposición” y carece de ética. La razón que esgrimió para tal reproche la diputada de C’s en la Asamblea de Melilla, María Dolores Martínez, es que en la reunión del Consejo Rector del Instituto de las Culturas en la que se propuso el nombramiento de Pardo estaba presente su cónyuge, que es funcionario adscrito a la Consejería de Presidencia, área de la que depende el organismo que preside la vicepresidenta segunda de la Asamblea, Paz Velázquez. La diputada del Grupo Ciudadanos consideró que dicho funcionario, a quien identificó como Bussian Mohamed, debería haber salido voluntariamente de la reunión porque se estaba dando “un conflicto de intereses claro”. Martínez, en rueda de prensa, quiso dejar claro ayer que no sabe si es legal la situación que se dio en el Consejo Rector del Instituto de las Culturas durante el nombramiento de María del Carmen Pardo. “Pero ética no era”, aseveró la parlamentaria, para quien se trató de una falta de respeto a la oposición porque ésta “era desconocedora de esta circunstancia”.
De hecho, dijo que de haberlo sabido, ella personalmente como representante de Ciudadanos habría pedido que dicho funcionario saliera de la sala. Sin embargo, aseguró que el Gobierno sí sabía del parentesco entre la candidata a ocupar el segundo puesto de máxima responsabilidad del Instituto de las Culturas y el funcionario que estaba allí presente, que anteriormente había estado adscrito a la Consejería de Bienestar Social.
Actualmente lo está a la Consejería de Presidencia, que dirige Paz Velázquez. La diputada de C’s insinuó que su actual puesto de trabajo en dicho departamento habría podido facilitar que tuviera conocimiento de que el puesto de director gerente del Instituto de las Culturas iba a quedar vacante. No en vano, Martínez aseguró que dicha plaza no se publicitó y por eso no optaron otros funcionarios locales para ocuparla, por lo que hubo que recurrir a una funcionaria del Estado.
Las críticas de C’s se centraron especialmente en el papel de la consejera de Presidencia en todo este asunto. Así, Martínez recordó que Paz Velázquez había dicho de la nueva gerente del Instituto de las Culturas que era licenciada en Psicología y era experta en multiculturalidad. “No dijo toda la verdad”, señaló la diputada, quien puntualizó que en el momento en que Pardo ha sido contratada como gerente del Instituto de las Culturas estaba trabajando como maestra, puesto que en la Administración pertenece al grupo A2.
Sin embargo, Martínez recordó que el puesto de gerente es un puesto de libre designación con un contrato eventual del grupo A1 de la Administración, de modo que este nombramiento supondrá un ascenso para Pardo.
La misma opinión
La diputada rechazó las críticas de Paz Velázquez contra C’s acerca del Instituto de las Culturas, y dejó muy claro que el partido naranja mantiene “la misma opinión” que tenía antes de las elecciones sobre este organismo. Concretamente, respecto a que podría suprimirse para ahorrar unos 400.000 euros de gasto público, al considerar que las funciones que ejerce bien podrían ser asumidas por otros departamentos de la Ciudad Autónoma. Cree, además, que contar con funcionarios no supondrá un ahorro.
De esta manera, Martínez devolvió el reproche a la diputada de Populares en Libertad (PPL), que desde la semana pasada ejerce como presidenta de dicho organismo. “Nosotros estamos dispuestos a colaborar en los asuntos importantes de la ciudad, pero ella debe entender nuestras reticencias para fiarnos de los argumentos de una persona que cambia de opinión con tanta arbitrariedad y facilidad por motivos que parecen obedecer más a intereses personales que a los intereses de la ciudadanía”, dijo.
