Tras un mes marcado por el ayuno matinal y el rezo, las familias musulmanas melillenses se reunieron ayer en torno al primer desayuno con el que poner fin al sagrado Ramadán. Por ese motivo ayer grandes y pequeños vistieron sus mejores galas para compartir juntos los manjares del primer desayuno, el del Aid el Fitr, en el que festejar con los seres queridos la alegría de haber cumplido con lo mandado por el Todopoderoso. Explicó Dris Mohamed, presidente de la Comisión Islámica de Melilla (CIM) que este día, el del Aid el Fitr, se dedica a las familias, a visitarlos incluso antes de volver al propio hogar para poder felicitar las fiestas. "Una vez que ha terminado el rezo es cuando corresponde felicitar la fiesta".
Familias
La fiesta de la Pascua Chica o 'Aid el fitr' se vivía en el interior de los hogares de los melillenses de religión musulmana reunidos alrededor de la mesa para tomar juntos el primer desayuno. Después, al salir a la calle, los más pequeños estrenaron ropa y los adolescentes vistieron chilabas blancas y gorros del mismo color. Las jóvenes, como las madres y hermanas, estrenaron caftanes de vistosos colores y ricas telas. La jornada se dedicó a las familias, a compartir con los seres queridos y con los amigos, la alegría de esta celebración por el deber cumplido. En muchos hogares se elaboraron platos especiales, primando los dulces clásicos.
