El secretario de la sección sindical de CCOO en el Aeropuerto de Melilla, Paco Casado, solicitó ayer a Aena urgencia para que amplíe el horario, por ser una necesidad para la ciudad, frente a otras grandes inversiones que considera que se han hecho en otras terminales sin sentido. El Aeropuerto de Melilla, aseguró, está "preparado" para operar de noche, al menos en lo que a infraestructuras se refiere, aunque “habría que ver” si es necesario ampliar la plantilla. "Desde la sección sindical de Comisiones Obreras en el Aeropuerto de Melilla instamos a Aena a no dilatar más una demanda que se viene realizando desde hace ya bastante tiempo y que es una necesidad". De esta forma comenzaba sus declaraciones Paco Casado, tras el anuncio hecho por el viceconsejero de Turismo sobre que la propuesta para ampliar el horario del aeródromo ya había sido puesta "sobre la mesa" a Aena y se estaba a la espera de respuesta.
Comisiones Obreras considera que Aena tiene que abandonar "esta incertidumbre permanente", que considera que está demostrando en esta cuestión, creando "una grave confusión en la ciudad". Casado pidió que apostara definitivamente por Melilla, acometiendo a la mayor brevedad el proyecto demandado desde la Ciudad Autónoma. "La ampliación del horario va a suponer una ventaja sustancial para los ciudadanos y va a contribuir a dar un impulso importante a nuestro aeropuerto e incentivar a las compañías aéreas para que puedan programar nuevas rutas, al no estar tan encorsetadas con un horario operativo tan escaso, como lo es el actual", declaró Casado. Por ello, pidió a Aena que no "regatee" con la ampliación del horario y sea "generosa" con la ciudad, autorizando una amplia franja horaria que permita la reactivación de "la única autopista" que tiene la ciudad, haciendo mención al aislamiento geográfico por el que se hace necesaria esta ampliación.
Casado aseguró que desde el punto de vista de las instalaciones, el aeropuerto está preparado para ampliar horario operativo, aunque la plantilla habría que estudiar si tendría que incrementarse, tras el plan de eficiencia que afectó a los aeropuertos de menos de 500.000 pasajeros al año, como es el de Melilla, y por el que se redujo el número de trabajadores.