El barcelonés comenzó el encuentro del pasado viernes, contra el Actel Força Lleida, a seis puntos de esa cifra y fue en el segundo cuarto cuando la alcanzó. En concreto, lo hizo con dos triples consecutivos que metían de nuevo a los melillenses en el partido. Carles Bravo Mateu, escolta del Melilla Baloncesto, superó el pasado viernes los 2.500 puntos anotados en la Adecco Oro. El barcelonés comenzó el encuentro contra el Actel Força Lleida a seis puntos de esa cifra y fue en el segundo cuarto cuando la alcanzó. Lo hizo con dos triples consecutivos que metían de nuevo a los melillenses en el partido. El azulón acabó el encuentro con 11 puntos y 9 tantos de valoración, siendo el tercer máximo anotador del decano esa noche.
El escolta catalán llegó a nuestra ciudad el pasado verano procedente del Quesos Cerrato Palencia, entidad en la que ha desarrollado gran parte de su carrera baloncestística en la Adecco Oro, aunque Bravo debutaba en la competición con el C.B. Tarragona 2016 el 22 de septiembre de 2006 en Huelva, logrando seis puntos sin fallo.
En el conjunto palentino fue uno de los buques insignia, llegando a ser incluso el capitán del equipo castellano-leonés. Además, resultó una pieza fundamental en el crecimiento de la escuadra morada en los últimos años, teniendo su zenit el pasado curso con la disputa de la final de ascenso a la Liga Endesa y la Copa Príncipe, dos competiciones en las que cayeron los palentinos ante el Ford Burgos y el River Andorra, respectivamente. Bravo participó en todos los encuentros del Quesos Cerrato en la campaña 2013-2014, con una media de 9,8 puntos y 2,1 rebotes por actuación.
Con la camiseta del Melilla Baloncesto lleva hasta el pasado encuentro anotados 277 puntos, igualando así su habitual promedio de 12 puntos por temporada. Este escolta de 1.93 metros de estatura es todo un especialista en la situaciones de uno contra uno, gracias a sus buenas condiciones físicas. De igual modo, es un consumado triplista que aporta muchos puntos desde el exterior, especialmente con lanzamientos desde las esquinas. Su facilidad para realizar penetraciones, unido a su conocimiento del juego, le convierte en un jugador capaz de abrir las defensas rivales, siendo también determinante en los momentos finales de partido. Y en defensa, se trata de un jugador de mucha intensidad y manos rápidas.
En definitiva, el veterano jugador entra en la exclusiva lista de jugadores que han superado los 2.500 puntos en esta competición, menos de 50, siendo el base Joan Riera el último en hacerlo con la camiseta del Club la anterior campaña.
