La Consejería de Bienestar Social ha negado que este año se haya excluido a alguna entidad o asociación de las subvenciones que concede para llevar a cabo diferentes programas relativos a las competencias de este departamento de la Ciudad Autónoma. Su responsable, María Antonia Garbín, salió así al paso de las críticas de CPM, partido al que acusó de mentir y hacer demagogia por criticar unas subvenciones y callar sobre otras, “según les convenga”. Según explicó Garbín en rueda de prensa, su Consejería ha dividido este año las subvenciones en dos grandes apartados. Uno es el de las ayudas nominativas, reflejadas en los Presupuestos de la Ciudad Autónoma, donde se establecen las ayudas para programas estructurales, que tienen una continuidad y, en definitiva, son “básicos” para Melilla. Entre ellas, por ejemplo, se encuentran las del Centro Asistencial, las Religiosas de María Inmaculada, Cáritas y asociaciones como ASOME, AFAL, ASPANIES o la AECC, entre otras.
Las ayudas nominativas ascienden en total a 6.469.044 euros y son diferentes de las subvenciones que se conceden por concurrencia competitiva, cuya partida es de 155.000 euros para ONG con ámbito de actuación en Melilla que llevan a cabo programas de otras características. Garbín dejó claro que este año se ha repartido ayudas a todas las entidades, ya que las que aparecen sin partida presupuestaria en las ayudas de concurrencia competitiva es porque ya tienen una ayuda nominativa.
