Entre las novedades, “elementos distintos”, una “narrativa muy determinada” y el cambio de ubicación del Nacimiento
El Foso del Hornabeque vuelve a acoger este año en su interior el Belén monumental con el que Melilla celebra tradicionalmente la Navidad. Al caer la noche de este domingo ha sido inaugurado por autoridades de Melilla junto al vicario episcopal, Eduardo Resa, que lo ha bendecido ante un buen número de melillenses que han querido presenciar este momento.
Uno de los momentos más emotivos de la inauguración fue cuando la Camerata Melillense y el Coro del Conservatorio de Melilla pusieron la nota musical tocando y cantando villancicos junto al Nacimiento, que este año cambia de lugar, ya que ha dejado la parte alta del Foso del Hornabeque para quedarse al resguardo de una de las murallas.
La consejera de Cultura, Festejos e Igualdad, Elena Fernández Treviño, no ocultó las ganas que había de enseñar este Belén monumental, que cuenta con “elementos distintos respecto a años anteriores”.
Otra de las novedades es que la narrativa “está muy determinada” y “respeta este año, más que otras veces anteriores, una narrativa muy concreta”, con la representación de la anunciación a los pastores y la anunciación de la Virgen. También hay un poblado de puestos artesanales en la parte alta y una posada antes de llegar al Nacimiento.
Treviño ha querido dar las gracias a todos los que este año han trabajado en la organización de este Belén “contra viento y marea, nunca mejor dicho”, debido a la meteorología adversa, que amenazó hasta última hora con aguar la inauguración.
