Europa Press
Al menos 125 personas han muerto, entre ellas 17 niños, y alrededor de 300 han resultado heridas en la región javanesa de Malang, (Indonesia) como consecuencia de los disturbios registrados en el estadio de Kanjuruhan tras un partido de fútbol entre los equipos del Arema FC y el Persebaya Surabaya, cuando las fuerzas de seguridad respondieron a una invasión de campo con el uso de gases lacrimógenos que ocasionaron una enorme estampida humana en el estadio.
El inspector general jefe de la Policía de Java Oriental, Nico Afinta, ha explicado que las protestas estallaron tras la derrota del Arema FC contra su adversario, según recoge al medio local ‘Suryamalang’. Los aficionados del equipo perdedor saltaron al campo de juego con la intención de demandar explicaciones por el resultado.
Anfinta ha afirmado que los guardias de seguridad tomaron medidas preventivas y de distracción para que «el caos no escalara» lo que ha incluido el uso de gases lacrimógenos. El gobernador adjunto de la provincia, Emil Dardak, ha confirmado la actual cifra de muertos en rueda de prensa recogida por Kompas TV.