Con una gran tarta la magnífica familia de Aulas Culturales para Mayores inició ayer los actos para conmemorar su cuarenta aniversario, una celebración que se prolongará a lo largo de todo el curso, según anunció su nueva directora, Celia Heredia, que asume con "ilusión este nuevo reto personal y profesional".
En el acto de ayer, que contó con la presencia de la viceconsejera Carmina San Martín y la consejera Fadela Mohatar, se rindió homenaje a seis de los alumnos más antiguos de Aulas: Eduardo García, Fina Gómez, Nico Espinosa, Isabel Pastor, Vicente Rincón y Marta Franco, y a título póstumo a Miguel Téllez, reconocimiento que recogido su esposa visiblemente emocionada. La tarde, además de dulces, contó con la actuación musical de la magnífica María Mendoza y con la proyección de varios vídeos con fotografías que resumen estos cuarenta años de vida.
40 años
Afirmó Celia Heredia que este aniversario supone "una evolución enorme, tanto en el alumnado que acude como en el tipo de talleres que se imparten, porque cuando se empezó los propios alumnos impartían las clases, y en este tiempo se ha pasado de los bajos del edificio de los sindicatos, a la UNED y finalmente al edificio actual en el que llevamos 22 años, y ahora, además de numerosos talleres, contamos con casi 900 alumnos".
En tono cómplice confirma la directora que la mayoría de los que acuden a clase son mujeres, "porque ellas son siempre más atrevidas y los hombres son más reticentes, pero les animamos a acudir, inscribirse y participar".
Indicó también que en este 40 aniversario se quiere tener muy presente al alumnado, de ahí que se haya homenajeado a seis de aquellos primeros hombres y mujeres que participaron en el arranque de Aulas. "Hemos querido tener este gesto con ellos para dejarles patente que no los olvidamos", dijo. En cuanto a este cumpleaños, indicó que pretenden desarrollar distintas actividades a lo largo del curso y que presumiblemente en febrero se proyecte toda una semana de actividades conmemorativas.
La consejera de Cultura, Fadela Mohatar, afirmó que el de ayer era "un día especial para la gran familia de Aulas", una institución que cuenta con el apoyo de la Ciudad Autónoma. "Aulas parte de la premisa de que no es un lugar para aparcar a las personas mayores, sino que es un centro para la formación y el desarrollo integral de las personas", donde pueden encontrar desde actividades físicas, a talleres de informática, arte o cultura general. Aseguró que Aulas, junto a la labor de la Viceconsejería del Mayor que dirige Carmina San Martín y el Aula Permanente de Formación Abierta (Universidad de Mayores) en colaboración con la UGR, "son tres grandes bloques que copan y cubren una gran demanda de atención del colectivo de personas mayores melillenses".
