En el día de ayer la vicesecretaria general de UGT, Concepción López, y el secretario general, Alonso Díaz, hicieron entrega del Premio Primero de Mayo 2015 que ha sido para la delegada sindical en el Ayuntamiento, Antonia Muñoz. La premiada agradeció este reconocimiento por parte del sindicato, el cual es para ella como “su casa”, a la vez que animó a los afiliados a que “siguieran poniendo empeño y luchando por los trabajadores”. El secretario general de UGT en Melilla, Alonso Díaz, junto a la vicesecretaria, Concepción López, hicieron entrega del Premio Primero de Mayo de UGT a la delegada sindical Antonia Muñoz o 'Toñi' que es como la conocen en el sindicato. Por ello le han realizado una plaza y le han entregado un reloj tallado con las iniciales del sindicato.
Para Díaz la premiada es una de esas personas que es una "sindicalista sin rostro", ya que "no siempre están expuestos a la imagen pública, sino que hacen su trabajo a diario junto a los trabajadores y atendiéndolos diariamente". Y es que según Díaz las personas que realizan la portavocía "estaríamos muy perdidos sin la colaboración tan necesaria de estos sindicalistas sin rostro tras 30 años en el sindicato".
A juicio de Díaz "estamos ante un ejemplo de lo que desde UGT perseguimos y el modelo de compañero que queremos, de dedicación al sindicato y los trabajadores".
De esta manera describió a la premiada, de quien también valoró "su cara amable y sonrisa permanente" ante los problemas de los afiliados y trabajadores. Así, el secretario general se mostró "agradecido" por que el sindicato "reconociera" a Muñoz este premio.
Por último, Díaz también mandó unas palabras a la responsable de sanidad del sindicato que en estos momentos se encuentra ingresada por problemas fruto "del estrés y el trabajo" al que está sometida y de la que esperan que "pronto esté trabajando".
La premiada agradeció a los compañeros del sindicato que "hayan estado a mi lado y apoyándome en momentos muy difíciles". Y es que para Antonia Muñoz las personas que han estado a su lado "más que compañeros, han sido amigos y familia, porque UGT para mi ha sido mi segunda casa".
Por todo ello, la sindicalista aseguró que seguirá "en la lucha desde lo que pueda hacer en adelante", y animó a todos las personas que se implican en su organización "que pongan el empeño y la lucha por los trabajadores que se merecen y sobre todo en este tiempo en el que estamos viendo como el Gobierno está mermando todos los derechos que conseguimos con mucho esfuerzo".
