Ángel Rodríguez, entrenador de la U.D. Melilla, comenzó su valoración del empate (2-2) conseguido en un terreno complicado, señalando que el punto obtenido ante el C.D. Coria tiene un valor positivo. «Considero que es un buen punto, en un campo que se les atraganta a muchos rivales, ante un equipo que llevaba una dinámica muy buena en los últimos partidos en casa”. Sin embargo, asegura que “no hemos empezado muy bien el partido, hemos concedido un gol en una acción innecesaria y que debíamos haber sido mucho más contundentes».
No obstante, destacó la reacción del equipo. «A partir de ahí, el equipo ha comenzado a crecer y a creer, ha generado algunas ocasiones y hemos empatado. En cuanto al tramo de la primera parte, considero que fue bastante igualada. Ya en el inicio de la segunda parte, el equipo salió muy enchufado y nos pusimos por delante en el marcador, pero lamentablemente, recibimos un golpe con un penalti que vamos a dejar en dudoso, y a partir de ahí intercambiamos golpes con el rival».
Por tanto, «considero que el empate es justo, aunque en la segunda mitad hemos tenido tres acercamientos muy buenos por la banda derecha al final del partido”.
Por otro lado, sobre la situación actual de la U.D. Melilla, Ángel Rodríguez resaltó la importancia de sumar puntos en cada encuentro. «Estamos en una situación en la que tenemos que sumar todos los partidos. Si es de tres, mucho mejor, pero si no, uno. Hemos venido a un campo donde últimamente los rivales han perdido, y le hemos competido. Hemos tenido el 2-3 para ponernos por delante, y de haberlo hecho no sabemos qué hubiese sucedido».
Además, el técnico leonés expresó su satisfacción por el rendimiento de su equipo. «La realidad es que estoy muy contento con el trabajo de mi equipo. Creo que esto puede ser un punto de inflexión, sobre todo fuera de casa. Es un primer paso para que vayamos fijándonos en lo que nos puede venir bien de cara al futuro y al inicio de un crecimiento como equipo que quizás hasta ahora no habíamos tenido».
Ángel Rodríguez fue preguntado además por lo que queda de la temporada y cómo afronta el Melilla los próximos partidos. «Ahora mismo no estamos para pensar en cuántos partidos quedan ni en cuántos puntos podemos sumar. Viene un buen rival muy difícil a casa. Nosotros seguimos en una situación complicada, pero vamos a depender de nosotros mismos. Por eso, afrontaremos el próximo partido como una auténtica final».
Por último, se mostró optimista sobre el crecimiento del conjunto unionista. «Como dije al llegar a Melilla, ya teníamos siete finales por delante. Ahora llevamos dos y estamos bien. Creo que el equipo ha crecido con respecto a la semana pasada y espero que la semana que viene sigamos creciendo. Estaremos mucho más cerca del objetivo», concluyó el entrenador de la U.D. Melilla.
