Además, de consolidarse su fecha de celebración, el festival deportivo está llamado a compensar los negativos efectos que provoca el éxodo vacacional de los melillenses en el período de la ya inminente Semana Santa Ayer se hicieron públicos los datos del barómetro de marzo del Centro de Investigaciones Sociológicas, CIS, en el que se refleja que el 82% de los españoles están preocupados por el desempleo, aunque sube ligeramente el número de quienes piensan que la economía va mejorando. La corrupción y el fraude siguen siendo el segundo mayor problema para la ciudadanía y el tercer lugar lo ocupa la economía. Lo que ocurre es que realmente no ocupa el tercer puesto sino el primero ya que la economía y el paro estan íntimamente relacionados De hecho, hay paro porque la economía no va bien o la economía no va bien porque hay paro, en definitiva, es lo mismo. Entre los dos sumarían el 90% y el resto sería para la corrupción y la llamada clase política que quedarían muy atrás de la misma forma que otros asuntos ya residuales, por tanto y, en definitiva, lo que verdaderamente preocupa y mucho al país es la economía.
Ciñéndonos a la local, la suma de pequeños granitos de arena conforman una playa. En Melilla quedó más que patente, el pasado sábado con la celebración de la II Carrera Africana de La Legión, el tirón y el auge cada vez mayor que con el devenir del tiempo va experimentando el deporte y su influencia a todos los niveles en la sociedad actual. El multitudinario evento, el de mayor participación que jamás se ha producido en Melilla, con más de 1500 deportistas inscritos, tal como señalaba el consejero de Dportes Miguel Marín, ha dejado nada más que beneficios en Melilla, ya que la ciudad recibió más de mil turistas la pasada semana, gracias a la Africana, entre participantes y familiares que, en muchos casos, se acogieron a los paquetes con precios especiales, tanto para viajar como para alojarse, ofertados por el Patronato de Turismo. Su presidente, Javier Mateo, considera que en función de las facilidades que se ofrezcan, más gente vendrá.
Los resultados inmediatos han sido claros, porque al margen de la excelente imagen que ha dado Melilla que ya de por sí es una baza importante en los tiempos que corren, la ocupación media de los hoteles melillenses se situó entre el 60 y 70% y en algunos establecimientos incluso en el 90%.
Un evento, por tanto, que habrá que potenciar en el futuro y que, sin duda, irá a más si se produce la unión de administraciones, deportistas y ciudadanos. Además, de consolidarse su fecha de celebración, el festival deportivo está llamado a compensar los negativos efectos que provoca el éxodo vacacional de los melillenses en el período de la ya inminente Semana Santa.
