La aspiración del Gobierno local de que el aeropuerto de Melilla pueda ampliar su horario de apertura para operar vuelos nocturnos tendrá que esperar de momento. Según explicó ayer el presidente melillense, Juan José Imbroda, hay un “problema técnico” porque el aeródromo de nuestra ciudad necesita unas balizas para que los aviones puedan aproximarse a la pista incluso en condiciones de escasa visibilidad, que sería el caso del horario nocturno. Esas balizas no están disponibles en Melilla, de modo que AENA está probando un nuevo sistema que pudiera permitir esa operatividad por la noche.
